Los buñuelos de viento son uno de los postres más típicos el 1 de noviembre y los días que le preceden (y también los que le siguen). Pero, ¿sabías que en algunos países también son muy típicos durante la cuaresma y durante Semana Santa? En España, como decimos, se comen sobre todo en la celebración de Todos los Santos. De hecho, es típico ver a familiares que llegan desde otros lugares geográficos para dar un repaso a sus seres queridos y traen, como obsequio, buñuelos de viento rellenos con diferentes sabores.
Hemos de reconocer que la elaboración típica es un tanto laboriosa, porque además de preparar el buñuelo en sí, también hay que hacer la crema pastelera (o también podéis optar por rellenarlos de nata o de chocolate y así os evitáis este paso).
Los típicos son fritos. Así que después de hacerlos y freírlos con aceite, llega el turnos de cortarlos un poquito y meter la manga pastelera. Los más golosos, después, los rebozan en azúcar o bien espolvorean azúcar glas.
Sin embargo, con el paso de los años ha ido haciéndose hueco otra receta un poquito más sana: en vez de freírlos, se hacen al horno y así no desprenden tanta grasa. Son perfectos para las personas que no toleran bien las frituras.
Para hacerlos más healthys aún podéis optar por alguna receta de crema pastelera baja en calorías o echarle imaginación para el relleno.
A nosotros, hemos de reconocer, los buñuelos de viento que más nos gustan son los de toda la vida y su elaboración puede suponer un pretexto perfecto para pasar una tarde en familia. Los peques pueden ayudarnos, por ejemplo, a rebozarlos, a hacer la masa o a darles forma.
Aunque lleve implícitos bastantes pasos, lo cierto es que no es nada complicada y, aunque no tengas mucha mano en la cocina, te quedarán unos buñuelos de vientos espectaculares.
A continuación te mostramos el paso a paso y algún que otro truco para que los buñuelos de viento te queden de rechupete.

INGREDIENTES
1/4 de litro de agua
125 gramos de harina
30 gramos de mantequilla
4 huevos
40 gramos de azúcar
Piel rallada de medio limón
Sal
Aceite para freír
Azúcar glass
PREPARACIÓN
1. Calienta el agua, la ralladura de limón, la mantequilla, el azúcar y una pizca de sal.
2. Cuando hierva, añade la harina y remueve.
3. Retire del fuego y deja enfriar. Cuando la masa esté tibia, añade los huevos uno a uno y amasa.
4. Deja reposar la masa dos horas.
5. En una sartén, calienta abundante aceite a fuego lento y añade la masa en pequeñas cucharaditas. Muévelas para que se doren por todos lados.
6. Pon los buñuelos en papel absorbente y espolvorea con azúcar glass.
7. Puedes rellenar los buñuelos con crema pastelera, nata, crema de chocolate...