El método Montessori aboga por la experimentación sensorial como la mejor forma de aprender en la infancia. Y apuesta por inspirarse en aquello que nos rodea para proponer retos y actividades a los niños y niñas. Con un poco de imaginación, puedes transformar muchos momentos cotidianos en una actividad Montessori. Ya te enseñamos cómo convertir el juego de bañar a un muñeco en una actividad educativa Montessori, y otra prueba de todo lo que puedes hacer con poco es esta actividad utilizando monedas que tengas sueltas por casa.
Antes de profundizar en la actividad y de contarte el paso a paso de la misma, hay que recalcar la importancia de hacerla en todo momento bajo supervisión de un adulto, especialmente con niños de corta edad, puesto que las monedas tienen cierto riesgo.

Dicho esto, la actividad es divertida y muy útil desde el punto de vista del aprendizaje para los niños y niñas. La firma Ioana Crisa, guía y divulgadora Montessori, que recomienda la actividad “para ese momento en el que el peque empieza a tener interés en cómo funciona el dinero”. Es decir, para peques con una edad avanzada en el segundo ciclo de Educación Infantil, 5 o 6 años aproximadamente,
La actividad es de tipo sensorial, de ahí que encaje perfectamente en los requisitos para que una actividad sea Montessori. “Permite que el peque experimente, toque, se de cuenta de los errores y los corrija por sí mismo”, defiende la guía Montessori, la misma experta que ya compartió cuáles son los juguetes que no compraría para sus hijos como guía Montessori.
A los beneficios citados, Iona Crisan añade otros derivados de esta actividad Montessori con monedas: “clasificando monedas el peque también desarrolla la concentración, la coordinación y se familiariza con conceptos de clasificación, conteo…”, apunta la experta Montessori.

Para hacer la actividad y proponerle el reto a tu hijo o hija solo necesitas una bandeja, a poder ser de madera, un recipiente más grande para las monedas y otros recipientes, tipo cuencos pequeños por ejemplo, para poder clasificarlas, que es el objetivo final de la actividad. Además, la guía Montessori recomienda lavar todas las monedas previamente, antes de que el menor empiece a manipularlas.
La actividad, como hemos dicho, no tiene más que la clasificación de las monedas por tipos, de ahí que sea importante utilizar monedas de distinto tipo, color y forma. Es, como dice la guía Montessori que la recomienda, “una actividad sencilla, pero muy completa que se puede hacer en todos los hogares”, concluye Ioana Crisan, que te invita a proponérsela a tu peque en casa.
Y si tu hijo no tiene la capacidad para diferenciarlas bien, también podéis hacer dinámicas más sencillas como contarlas, identificar los números que hay en ellas o, por qué no, otros objetos o personas que a veces también están acuñados en las monedas que todavía nos quedan a todos y todas sueltas por casa, en algún cajón o cajita donde las tengáis almacenadas para tirar de ellas cuando necesitáis suelto para ir a por el pan. Y hasta os sirven para hacer juego simbólico si le gustan los supermercados. En definitiva, ¡seguro que se te ocurre cómo sacarles partido con tu peque!