El embarazo es una etapa en la que los cambios físicos y las hormonas generan una preocupación de la mujer por la estética que puede llegar a ser muy evidente. Muchas mujeres presentan aumento del vello muy marcado por ejemplo en la linea alba de la barriga, lo cual les resulta molesto y se plantean decolorarlo para mejorar su aspecto. Además, muchas otras embarazadas realizaban decoloraciones o aclaramiento de su cabello de forma natural en muchas ocasiones. Ahora, con el embarazo, surgen muchas dudas sobre si es posible continuar realizando estos procedimientos o no.
No hay ninguna evidencia científica de que los productos de decoloración puedan ser perjudiciales en el embarazo, ni para la madre ni para el feto, ya que actúan a nivel local y superficial, en el pelo, y no se absorben ni pasan a la sangre, por lo tanto, no llegan a la placenta ni al feto.
Sin embargo, la utilización de productos químicos, podría generar quemaduras, reacciones alérgicas, enrrojecimiento de la zona o urticaria. Incluso podría ocurrir utilizando los mismos productos que una mujer ha utilizado de forma habitual anterioremente. Los cambios que sufre nuestro cuerpo durante el embarazo, pueden hacer que se produzcan malas tolerancias a productos que anteriormente nos funcionaban muy bien.
No obstante, siempre es mejor usar productos naturales, como la camomila, el te de manzanilla o incluso el agua oxigenada, que contienen ingredientes más suaves para la piel. Probar siempre primero en una zona segura y pequeña de la piel y del vello que queremos decolorar y en función de la tolerancia, valorar ampliar la zona a tratar
Pero si consideras necesario utilizar la crema decolorante, no te preocupes porque no vas a perjudicar a tu bebé. Tampoco se ha demostrado que los tintes del pelo sean nocivos durante el embarazo, siempre y cuando no contengan Amoniaco.
Optar siempre por opciones naturales y no por productos químicos, sería de elección durante el embarazo.
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