La dieta durante el embarazo puede influir en las preferencias alimentarias de tu hijo
La exposición prenatal a diferentes sabores y nutrientes a través de la dieta materna puede influir en las preferencias alimentarias del niño en el futuro. Asegúrate de llevar una dieta equilibrada, variada y saludable durante el embarazo.

¿Sabías que las madres condicionan los gustos de sus hijos ya desde que están en la tripita? Sí, como oyes.
La alimentación de una mujer embarazada no solo es importante para el crecimiento y desarrollo del feto, sino que también puede influir en las preferencias alimentarias del bebé. Se ha demostrado que la exposición prenatal a ciertos alimentos puede afectar la aceptación de estos alimentos por parte del bebé una vez que empieza a comer alimentos sólidos.
Aquí os dejamos algunos de los factores responsables en influir en las preferencias alimentarias de tu hijo:
1. Sabores en el líquido amniótico
Los bebés pueden detectar los sabores en el líquido amniótico a partir de las 15 semanas de embarazo y el feto puede tragar pequeñas cantidades de este líquido, lo que le permite experimentar con diferentes sabores y aromas.
Si la madre consume alimentos con un sabor dulce o amargo durante el embarazo, es posible que el feto desarrolle preferencias por esos sabores más tarde en la vida y que tienden a tener una mayor aceptación de esos sabores cuando se les ofrecen más adelante.
2. Exposición a través de la leche materna
La leche materna también puede exponer al bebé a diferentes sabores que varían según la alimentación de la mamá. Por ejemplo, si la mamá consume alimentos fuertemente aromatizados o especiados, es posible que el bebé muestre una preferencia por esos sabores más tarde.

Una mamá dando pecho
Además, los bebés cuyas madres consumen una variedad de alimentos durante la lactancia, son más propensos a aceptar mayor variedad de alimentos cuando comenzaron a comer alimentos sólidos.
También es interesante recalcar que, la leche materna contiene compuestos que pueden afectar los receptores de sabor del bebé, lo que puede influir en sus preferencias alimentarias.
Por ejemplo, la leche materna contiene endocannabinoides, que son sustancias químicas similares a los componentes activos de la marihuana. Los endocannabinoides pueden afectar el apetito y la sensación de saciedad del bebé, lo que puede influir en sus preferencias alimentarias a medida que crecen.
3. Influencia a través del olor
El olor de ciertos alimentos puede aumentar la aceptación de estos alimentos en los bebés y niños pequeños.
- Alimentos con sabor fuerte como el ajo, la cebolla… pueden transmitir su sabor a través de la leche materna y el líquido amniótico.
- Frutas y verduras frescas y variadas que consuma la madre durante el embarazo pueden aumentar la exposición del feto a diferentes sabores y nutrientes, lo que puede influir en las preferencias alimentarias del niño más adelante en la vida.
- Alimentos dulces suelen ser los más preferentes por los bebés, y si la mamá tiene una dieta rica en estos alimentos, influirá aún más en las preferencias alimentarias.
- Alimentos ricos en grasas como los aguacates, los frutos secos y los pescados grasos, pueden transmitir sus sabores y nutrientes a través de la leche materna y el líquido amniótico.

Ejemplos de alimentos dulces
Es importante tener en cuenta que la exposición temprana a una variedad de sabores y nutrientes es importante para ayudar a los niños a desarrollar una dieta saludable y diversa a lo largo de su vida.
En resumen, la dieta de una mujer embarazada puede influir en las preferencias alimentarias del bebé. Por eso consumir una dieta equilibrada y saludable durante el embarazo y la lactancia es tan importante, porque ayuda a establecer una preferencia por alimentos saludables en el bebé.