Los beneficios de la lactancia materna a partir del año

Como sabemos, la lactancia materna es la principal fuente de nutrientes que puede tener un bebé. Continuar con este beneficio a partir del año, si es la opción que queremos escoger, es bueno para ellos y no es peligroso para nosotras. Miryam Triana, responsable de la Consulta Médica de Lactancia Materna nos lo cuenta.
Lactancia

Es natural plantearnos cuándo debemos destetar a nuestros pequeños, sobretodo si vemos que aún disfrutan mamando. Muchas veces es el trabajo, te explica sus beneficios.

¿Por qué es bueno seguir con la lactancia a partir del año?

La OMS y la mayoría de sociedades científicas pediátricas recomiendan lactancia materna exclusiva hasta los 6 meses y combinada con otros alimentos hasta los 2 años o más, si la madre y el niño así lo desean. Sin embargo, las cifras de lactancia van cayendo según los niños crecen. Muchas lactancias terminan con la vuelta de la madre al trabajo (la duración media de la lactancia en nuestro país se estima en 6 meses) y se calcula que solo el 28 % de los bebés reciben lactancia materna exclusiva hasta los 6 meses. Estas cifras irían disminuyendo al año y a los 2 años.

Pero, ¿sigue alimentando la leche materna a partir del año?

La leche materna no pierde sus propiedades con el tiempo y puede ir variando su composición adaptándose a la edad del bebé. Así, los primeros 2-3 días de vida el bebé recibe calostro (rico en defensas y proteínas y con menos grasa para su fácil digestión) y pasa progresivamente a leche madura. A partir del año, la leche materna aumenta su cantidad de grasa, aportando los nutrientes que precisa un niño más mayor. Así, no solo es falso que no alimente o se “agüe”, sino que resulta un alimento de mayor calidad que la leche de vaca e idóneo para niños más mayores. Un niño de esta edad puede obtener hasta 1/3 de sus necesidades calóricas y proteicas de la leche materna, además de vitaminas y minerales.

¿Qué otros beneficios aporta?

Como hemos dicho, la leche materna no pierde propiedades con el tiempo y continúa siendo una fuente importante de inmunoglobulinas y otros elementos de defensa frente a infecciones. Los niños que siguen siendo amamantados tienen menos infecciones que los que no lo son.

Además otros beneficios (menor incidencia de leucemia, diabetes y mayor desarrollo intelectual) parecen ser mayores a mayor tiempo de lactancia materna. La duración de la lactancia también está implicada en el mejor desarrollo psicosocial y emocional.

Igualmente, los beneficios para la madre se mantienen. A más tiempo de lactancia materna, se asocia un menor riesgo de cáncer de mama y de ovario y de diabetes tipo 2.

¿Y hay algún riesgo al seguir amamantando más tiempo?

No, ninguno. El único problema que puede surgir es el rechazo social, pues no estamos acostumbrados en nuestro medio a ver niños que “caminan o tienen dientes y siguen mamando. La decisión de cuánto tiempo dar el pecho es personal y todas las decisiones deben ser igualmente respetadas. 

¿Cuál sería la edad “natural” del destete en el caso de que sigamos por encima de los 2 años?

Si dejamos a un niño que mame hasta que quiera, se destetaría entre los 2 y los 7 años.

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