Aunque los pediatras insisten en la necesidad de respetar los ritmos de los niños en lo que respecta al control de esfínteres, son muchos los padres que deciden aprovechar el verano y las buenas temperaturas para iniciar la temida retirada del pañal.

Una decisión tomada, entre otros, por la edad media a la que los niños suelen empezar a controlar esos esfínteres (entre los dos y los tres años, en caso del diurno, y alrededor de los cinco el nocturno) y porque en la temporada estival todo es más sencillo: pueden corretear por casa sin pañal y, cuando tengan necesidad de hacer pis, pedirles que usen el orinal o el retrete; si se mojan la ropa las buenas temperaturas harán que no cojan frío… Sin embargo, como decimos, los pediatras insisten en que esta no es la mejor opción. “Los padres muchas veces se ven influenciados por la familia, los amigos, el colegio… para retirar el pañal en un determinado momento, y esto no debería ser así. Es el propio niño el que nos va a indicar cuándo es el momento adecuado”, explicaba en Ser Padres la pediatra Carmen de la Torre.
Porque cuando llega el momento en el que el niño está preparado para dejar el pañal, da igual que sea verano que invierno, lo hará tan bien que no se mojará, ni se manchará.
¿Cómo saber si el niño está preparado para la retirada del pañal?
Saberlo será muy sencillo si se tienen en cuenta algunas señales que pueden indicar a los padres que ya ha llegado el momento, que está preparado para iniciar el control de esfínteres.
Os contamos 10 señales más evidentes que van a indicaros que vuestro hijo, probablemente, ha dado un paso más en su desarrollo y está preparado para empezar a dejar el pañal atrás:
- Pide ir al cuarto de baño
- Insiste en quitarse el pañal, se le nota incómodo con él
- Aguanta varias horas con el pañal completamente seco (esto indicará que está adquiriendo la continencia necesaria o las ganas de ir al baño)
- Dice ‘pipí’ o ‘caca’ señalando el cuarto de baño (aunque cuando lleguemos a sentarlo, ya esté mojado, es señal de que saben qué está pasando)
- Es capaz de andar solo y tiene buena coordinación con las manos
- Ha conseguido subir y bajarse solo los pantalones
- Sabe seguir instrucciones, como sentarse en la silla o imitar a alguien
- En sus gestos se puede notar el momento en el que va a orinar (por los gestos o las posturas que pone)
- Muestra interés en el proceso de ir al baño: van detrás de mamá o papá y preguntan por qué se sientan en el retrete, quieren utilizar braguitas o calzoncillos
- Muestra signos de pudor e independencia: se toca el pañal cuando está miccionando o defecando, se esconde en su habitación o detrás de algo para que no le vea nadie…
Regresiones en el control de esfínteres
Eso sí, las familias también tendrán que tener en cuenta que pueden aparecer ciertas regresiones en ese control; esto es, que pueden dar, de repente, pasos hacia atrás cuando pensabais que ya lo había conseguido. Puedes encontrar más información sobre ellas en este link.