¿Es seguro pintar la habitación del bebé durante el embarazo?
La ilusión por la llegada del nuevo bebé hace que tanto la mamá como el papá se animen a preparar con muchísimo cariño e ilusión la nueva habitación. Pero, ¿es seguro utilizar pintura?
El embarazo supone la llegada de muchos cambios, y no solo en el cuerpo de la futura mamá. Son comunes, por ejemplo, la aparición de las típicas náuseas (que no siempre son matutinas), acidez de estómago, vómitos, cansancio extremo, calambres en las piernas… Y también son tremendamente habituales los vaivenes anímicos, propios de los cambios hormonales.
Pero también supone un cambio en la propia vida no solo de la futura mamá, sino también del papá. La llegada de un bebé a la pareja puede igualmente derivar en emociones encontradas, alegría, felicidad… y también cierta ansiedad, estrés y preocupación. Las ganas porque llegue el momento del nacimiento se pueden entremezclar con cierta tensión emocional, y con las ansias porque todo salga bien.
Por suerte, una de las opciones a la hora de mitigar toda esa ansiedad es preparar la habitación del bebé, lo que puede pasar a convertirse en una actividad tan distraída como intensa, a la par que bonita. Pero dado que, ahora, tiendes a preocuparte más no solo por tu propia salud, sino por la salud del bebé en desarrollo, es normal que te hagas algunas preguntas, como ¿es posible pintar durante el embarazo? ¿la pintura puede acabar afectando negativamente a la salud del bebé?
¿Es posible y seguro pintar durante el embarazo?
No hay duda que decorar la habitación o el cuarto del bebé pasa a convertirse en un auténtico rito de iniciación para los futuros padres. Y, entre todo el proceso, escoger el color de la pared perfecto es simplemente un elemento fundamental.
Lejos del esfuerzo que pueda suponer el hecho de pintar una habitación entera, una de las principales preocupaciones de la mayoría de las futuras mamás en este sentido, es acerca de si se trata de una actividad cien por cien segura, y no precisamente por pintar en sí, sino más concretamente por la pintura.
Lo cierto es que la mayoría de las pinturas que podemos encontrar actualmente en el mercado contienen una serie de sustancias químicas, necesarias en definitiva para su textura, composición y color. No obstante, como opinan los especialistas, en realidad pintar una habitación de la casa, como podría ser el nuevo cuarto del bebé, implicaría en realidad niveles muy bajos de exposición.
Al menos por el momento no existe una evidencia clara de que la exposición a la pintura pueda ser verdaderamente perjudicial para el embarazo. Pero, como ocurre con otros productos, como podría ser el caso de los artículos de limpieza, limitar la exposición innecesaria a este tipo de productos durante la gestación siempre se convierte en una buena idea.
El problema, como es de imaginar, es que por el momento no existen muchos estudios sobre esto (algo que es evidente, dado que, después de todo, los estudiosos no van a exponer a las mujeres embarazadas a los vapores de la pintura, únicamente para indagar acerca de qué sucede).
Sí es cierto que existen algunos estudios sobre resultados reproductivos en mujeres y hombres pintores, los cuales han sugerido la existencia de un aumento tanto en abortos espontáneos como en cáncer infantil. Sin embargo, como coinciden en señalar los especialistas, en realidad estos estudios carecen de resultados consistentes.

Pintando durante el embarazo
Debido fundamentalmente a las dudas que existen sobre ello, no existe en realidad un trimestre que pueda ser considerado como “seguro” a la hora de pintar durante la gestación. Eso sí, el primer trimestre sí se considera como el de mayor riesgo, dado que durante este tiempo los órganos del bebé aún están formándose.
Por tanto, si la futura mamá decide pintar la habitación del bebé durante el embarazo, en un primer momento lo más recomendable es considerar cuál sería el alcance del proyecto, y ser inteligente acerca de los niveles de exposición. Los proyectos únicos de un solo día, como podría ser pintar el cuarto del bebé, suponen una exposición aislada, y es mucho mejor que, por ejemplo, pintar toda la casa en el transcurso de muchos meses, dado que supondría una exposición crónica.
¿Existe alguna pintura segura para utilizar durante el embarazo?
En realidad no existe un tipo de pintura que pueda llegar a ser considerada como 100% segura para las mujeres embarazadas Eso sí, no todas las pinturas que encontramos en el mercado son iguales. Por tanto, lo ideal es evitar pinturas con solventes fuertes.
La pintura a base de aceite no se convierte precisamente en una buena opción, dado que este tipo de pintura emite vapores, conocidos como compuestos orgánicos volátiles, que pueden causar dolor de cabeza, náuseas, irritación ocular, mareos y fatiga. Además, sí se sabe que niveles altos de exposición a las pinturas que contienen tolueno (un solvente), causarían síntomas similares a los ocasionados por el síndrome de alcoholismo fetal.
La pintura acrílica, o de látex, al ser elaborada a base de agua sí tiende a considerarse como mucho más segura, pero aún podría contener ciertos solventes, por lo que seguiría presentando riesgos potenciales durante el embarazo. En estos casos, lo más recomendable es evitar aquellos que contengan biocidas, éteres o etilenglicol.
¿La opción más adecuada? Las pinturas naturales que no contengan compuestos volátiles. Pero hay que tener cierto cuidado, dado que aunque algunas bases de pintura no los contengan, el pigmento de color que se agrega después sí podría tenerlo.