En el Pirineo oriental navarro hay escondida entre montañas una de las joyas naturales más bonitas de España, la selva de Irati. El espacio, ubicado en una cuenca, es accesible desde el valle de Salazar y desde el valle de Aezkoa, desde donde hay miradores interpretativos en lugares con vistas idílicas de la selva, como es el caso del d de Ariztokia (Garralda), el de Pikatua (Izalzu) o el Alto de Tapla (Ochagavia).
Para acceder a Irati hay que pagar, mientras hay servicio de guardas, una tasa de mantenimiento variable. Con ella, según informa el gobierno navarro, se contribuye al desarrollo sostenible de los valles. Desde el acceso, ya solo es posible entrar en bicicleta o a pie, y el visitante recibe un mapa con los senderos más conocidos de Irati.
Un extenso bosque que, aunque se haya explotado forestalmente desde el S.XV, se conserva en plena forma gracias al respeto que le ha mostrado la ciudadanía de estos valles.
Hayas, robles, abetos, abedules, sauces, helechos y musgos, entre otros, sirven de morada para ciervos, corzos, jabalíes y multitud de habitantes más, que aportan a este entorno una gran riqueza medioambiental.
Con niños, muchos de estos senderos por el segundo hayedo abetal más extenso y mejor conservado de Europa -el primero de la Península Ibérica- son accesibles. Un buen punto de partida es Orbaizeta, el lado oriental, desde la que parten algunas rutas muy aconsejables para hacer con peques, la mayoría en sentido circular.
Anbulolatz
Es un recorrido circular de unos 8,2 kilómetros que recorre el sendero SL- Na 50C. Pasa dos veces por encima del arroyo Arranzola y tras pasar por un claro del hayedo, llega a una zona de pastos.
Azalegui
Es un sendero circular en torno a la ermita de San Esteban que tiene un recorrido de casi 7 kilómetros y alcanza, entre otros lugares, la zima de Azalegui. Está señalizado como sendero SL- Na 51C.
Plaza Beunza
Otro sendero circular, marcado como SL - Na 52C, que tiene un recorrido total de poco menos de 6 kilómetros. La ruta bordea el embalse y es muy sencilla en cuanto al nivel de exigencia.

Paraísos Erlan
5 kilómetros y medio de recorrido circular que parte desde el parking de la cantera situada junto a la presa de Irati. Se pueden divisar unas preciosas vistas del embalse durante el recorrido, señalizado con SL- Na 54C.
Bosque de Ursario
Recorrido circular de 7,75 km señalizado SL- Na 57B. Desde el refugio de Azpegui se alcanza el collado del mismo nombre y el famoso hayedo de la selva de Irati.
Mendilatz
6,62 kilómetros en sentido circular que parten desde el refugio de Azpegui hasta la cima de Mendilatz, caminando entre pastos y hayedos. Es una de las rutas más exigentes de la lista porque tiene un ascenso y un descenso pronunciado, así que es recomendable para hacer con niños que no sean muy pequeños y a los que les guste la naturaleza. El sendero está señalizado con el SL- Na 58B.