Si tienes o has tenido un bebé recién nacido recordarás con desesperación uno de los momentos más estresantes de un bebé sano: los temidos cólicos del lactante. Llantos intermitentes, a última hora de la tarde, sin causa identificada, durante los primeros tres meses de vida, y normalmente después de comer. Los lloros del bebé son inconsolable, excesivos y prolongados. ¿Qué le pasa? ¿Cómo solucionarlo? Tranquilos, el 40% de los bebés recién nacidos los padecen, según nos ha explicado Fernando García-Sala, doctor en Medicina y profesor de Neonatología durante una charla exclusiva organizada por la farmacéutica Andaru Pharma.
¿Por qué se producen los cólicos del lactante?
El experto ha explicado que el cólico del lactante es un trastorno benigno que afecta hasta 1 de cada 4 lactantes sanos y surge en las primeras semanas de vida del bebé. La parte positiva es que desaparecen alrededor del tercer o cuarto mes de edad. No obstante, la falta de consuelo que experimenta el bebé suele traer de cabeza a los padres y llega a desesperar a muchos progenitores que no saben qué hacer para aliviarle y calmar el llanto. En este artículo, vamos a ayudar a esos padres que no están familiarizados con los cólicos para que aprendan a tratarlos con tranquilidad.
¿Cuándo se considera cólico?
Se considera cólico del lactante cuando durante al menos tres horas al día y tres días a la semana sufre estos llantos inconsolables. En palabras del neonatólogo Fernando García-Sala "es un trastorno digestivo funcional que se reconoce por ser un llanto constante acompañado del movimiento de las extremidades, con la espalda arqueada y ligeros ruidos en el estómago".
¿Cómo se producen los cólicos?

¿En qué momento de la vida del bebé aparecen?
Se ha visto que la microbiota de los bebés con cólico, ya desde las primeras semanas de vida, es menos diversa y menos estable (tarda más en desarrollarse) presentando niveles menores de colonización de Lactobacilos y mayor número de Proteobacterias (E.coli y Klebsiella) que en los niños sin cólico. Estas bacterias producen gases e inflamación intestinal que generan malestar en el bebé recién nacido.
¿Cómo tratar de prevenirlos o aliviarlos?
Si habéis acudido al pediatra o lo habéis comentado entre familiares o amigos, os hablarán de tiempo, de recursos caseros, de infusiones, de masajes infantiles, de tratar de dar las tomas más despacio, el acunamiento, la música... Remedios útiles que apoyarán la labor del probiótico 'casi' mágico que os queremos recomendar, unas cinco gotas diarias que previenen este primer dolor humano. Los probióticos son microorganismos vivos que benefician a la salud, totalmente naturales porque actúan sobre las baterias intestinales.