Síntomas del embarazo gemelar o de mellizos

Cualquier mujer embarazada experimenta múltiples cambios en su cuerpo durante su etapa gestacional. Pero en el caso de los embarazos múltiples, dichos síntomas se vuelven mucho más intensos. Descubre qué señales te podrían hacer ver que estás esperando la llegada de más de un bebé:
Síntomas del embarazo gemelar o de mellizos

Hoy en día, cada vez son más las mujeres que pasan por un embarazo múltiple ya que también son cada vez más comunes algunos factores que propician esta situación. Una mayor edad de la madre o los tratamientos de fertilidad predisponen en gran medida una gestación múltiple. Es decir, un embarazo de gemelos o mellizos.

Tanto si se trata de un solo bebé como si son dos (o más) una embarazada experimenta en su cuerpo una serie de cambios en todos los sentidos. No obstante, cuando se trata de un embarazo de más de un niño, estos síntomas son más intensos. Veamos cuáles son los más frecuentes en este tipo de gestaciones.

Síntomas más frecuentes de un embarazo gemelar

Como norma general, los síntomas de un embarazo múltiple aparecen antes y de una manera más intensa que en un embarazo único. El motivo de esto es que la mujer embarazada tiene más cantidad de hormonas circulando por su cuerpo. De hecho, la duración de la gestación también varía en algo, un embarazo múltiple suele durar 3 semanas menos.

Aunque se sabe que cada persona y cada gestación es un mundo, estos son algunos de los síntomas más habituales que te podrían hacer pensar que estás embarazada de mellizos o gemelos:

  • Subida repentina de peso en el primer trimestre. Las mujeres embarazadas de dos o más bebés suelen subir unos 5 kilos en los tres primeros meses. Esto se debe no solo a que sus ganas de comer se incrementan, sino también al aumento del útero, al mayor volumen sanguíneo y al propio desarrollo de los niños.
  • Aumento del abdomen. Por razones obvias, el crecimiento del abdomen se notará mucho más que en el caso del embarazo de un solo bebé. Esto quiere decir que el tamaño del útero es mayor porque desde el principio se empieza a dilatar para poder albergar a los dos bebés. Además, también hay más líquido amniótico.
  • Náuseas y vómitos matutinos son muy notorios. Debido a la acción de las hormonas, los cuadros de náuseas matinales suelen ser más intensos, además, también se presenta una mayor salivación y aumenta la propensión a tener ardores y reflujo.
  • Cansancio, fatiga y somnolencia de manera extrema. Dado que en el interior de la madre se está formando más de un bebé, el cuerpo de la misma necesitará el doble de energía. Tener bastante sueño entra dentro de la normalidad, por lo que lo mejor es escuchar al organismo y descansar lo máximo posible.
  • Adelanto de los movimientos de los fetos. La mayoría de embarazadas nota con antelación las famosas “pataditas” de los bebés. Cuando se trata de un solo bebé se empiezan a sentir los movimientos entre las semanas 18-20, pero cuando se trata de un embarazo múltiple pueden experimentarse hasta 2 semanas antes.
  • Sensibilidad mamaria intensa. Como decimos, los cambios hormonales son más drásticos aún, por lo que tanto la sensibilidad como la producción de leche materna aumentarán.
  • Incremento de la frecuencia cardíaca en un 15% que hace que aparezcan palpitaciones desde el primer trimestre.
  • Diminución de la capacidad respiratoria. Como el útero crece, desplaza el diafragma hacia la cavidad torácica. Asimismo, la futura madre también necesita de un 20% más de oxígeno, es normal que entonces tenga sensación de que le falta aire mucho antes.

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