La forma de educar a tus hijos está condicionada, irremediablemente, por tu infancia

La influencia de la infancia de los padres en su estilo de crianza: cómo romper patrones y establecer una crianza saludable para nuestros hijos.
crianza

La crianza implica una serie de comportamientos y actitudes adoptados por los padres y cuidadores para satisfacer las necesidades físicas, emocionales y sociales de los niños a medida que crecen y se desarrollan. Incluye aspectos como el cuidado básico de la salud y la nutrición, la estimulación cognitiva, emocional y social, la fijación de límites y normas, la disciplina positiva, la promoción de la autoestima y la autonomía, entre otros.

Crianza infantil - Svetlana Repnitskaya

Aunque existen diferentes estilos de crianza, es importante que los padres y cuidadores desarrollen un estilo de crianza que promueva el bienestar y la salud física, emocional y social de los niños y niñas, y que sea coherente con sus valores y creencias.

¿Pero está influenciada en la infancia que tuvieron?

La infancia de los padres puede tener una influencia significativa en la educación que dan a sus hijos, ya que la forma en que fueron criados puede afectar su propio enfoque y estilo de crianza.

Infancia - Getty Images

Éstos pueden adoptar algunas de las mismas prácticas que sus propios padres usaron al criarlos, o pueden optar por hacer las cosas de manera diferente en función de sus propias experiencias y perspectivas.

En este sentido, Yvonne Laborda, creadora del término Crianza Consciente, en su libro 'Dar voz al niño' (2017), nos habla de la importancia de los introyectos entendiendo por estos como “todas esas órdenes, mandatos, creencias, frases que nos decían u oíamos y que hemos hecho nuestros”.

Éstos pueden venir desde la familia, desde la escuela o simplemente de la propia cultura.

Frases del tipo: “Los niños no lloran” o “no interrumpas cuando los adultos hablan” van a condicionar nuestra forma de crecer.

¿Cómo afecta nuestra infancia a la hora de educar?

Educación - KidStock/Blend Images

Para escribir este libro, Yvonne, cuya infancia no fue nada fácil, estudió el comportamiento de los niños durante sus años como maestra y, sobre todo, se dejó escuchar a sí misma y su niña interior “herida”, como ella lo nombra.

A raíz de esto, la autora afirma que “nuestra niña o niño interior herido puede llegar a dominar nuestra vida por completo desde su vacío y dependencia emocional” por lo que esto se verá reflejado en la forma en que educaremos a nuestros hijos.

Si hemos tratado y sanado estas heridas, nuestra forma de crianza será diferente, ofreciéndoles más apoyo emocional, estableciendo límites claros y respetuosos, y brindándoles una educación más estimulante y empática.

En cualquier caso, es importante que los padres reflexionen sobre su propia crianza y consideren cómo esto puede influir en la educación de sus hijos.

Actualmente se puede buscar apoyo y recursos adicionales, como libros, grupos de apoyo o terapia, para ayudar a desarrollar un enfoque de crianza saludable y efectivo que se adapte a las necesidades de sus hijos y de su propia familia.

Recomendamos en