Tiene nueve letras y es difícil de olvidar. Aparece en novelas y hasta en alfombras rojas. Un nombre que no muchas niñas llevan, pero sí muchas protagonistas lucen.
Parece una enfermedad de otro siglo pero la realidad es que la escarlatina está más presente que nunca. Son muchos los pediatras que alertan de un aumento de la incidencia; tanto que la OMS también lo ha admitido.
En los últimos días, la alarma por el aumento de casos de infecciones por estreptococo ha elevado la preocupación entre los padres. Sin embargo, la mayoría de las veces, esta bacteria es causante de enfermedades leves, conocidas y frecuentes en la consulta de pediatría: escarlatina e impétigo.
Cuando decimos a unos padres: “Tu hijo tiene escarlatina” es muy probable que nos pregunten extrañados. “¿Cómo?, ¿pero eso no estaba erradicado?, ¿es una enfermedad grave?”. A la mayoría de las personas, la escarlatina le suena a enfermedad de principios del siglo pasado. Y sí, causaba muertes hasta la llegada de la penicilina. Afortunadamente, a día de hoy, es una enfermedad fácil de tratar.
¿Qué hay detrás de un picor o un escozor de ojos en niños? La conjuntivitis está detrás de las causas más frecuentes. Una infección que, por suerte, se cura de forma sencilla. Pero, ¿qué síntomas produce y cómo diferenciarla de otras infecciones?
Dependiendo de la enfermedad que sufra el pequeño, así son los criterios recomendados por las instituciones sanitarias para regresar al centro escolar.
Según los expertos, la lactancia materna durante los primeros 6 meses de vida del bebé serían ideales para proporcionarle probióticos y prebióticos beneficiosos para el buen desarrollo de su sistema inmunológico.
La leche materna se convierte en el principal alimento del bebé hasta, al menos, los seis primeros meses de edad, momento en el que debe ser complementada con los alimentos sólidos. Pero, ¿los bebés alimentados a pecho necesitarían vitaminas?
Es un problema que no solo sufren los adultos, los niños también pueden padecerlo. La gastritis aparece de forma repentina e intensa y provoca un dolor fuerte en la parte superior abdominal. Mira aquí que síntomas presenta, las causas más frecuentes y algunos consejos para tratarla.
Aunque en muchas ocasiones son solo un síntoma de una afección de poca importancia (en muchos casos incluso pueden resolverse solas con el paso de los días), en ocasiones las petequias pueden ser una señal de una enfermedad subyacente más grave, en especial cuando se acompañan de otros síntomas, como fiebre alta.
También conocida como fiebre escarlata, se convierte en una infección causada por las mismas bacterias que ocasionan la faringitis estreptocócica. Suele ser una infección fácil de diagnosticar, porque a los pocos días de surgir la fiebre y el dolor de garganta empieza a formarse una erupción cutánea verdaderamente característica.
La faringitis estrepcocócica se caracteriza por ser una de las infecciones más comunes entre los niños, sobre todo entre los niños pequeños. Al tratarse de una infección bacteriana, el tratamiento médico suele ser a base de antibióticos, siendo el dolor de garganta uno de sus síntomas más habituales.
Conocida bajo el nombre de "quinta enfermedad", se trata de una infección vírica que origina una erupción cutánea tremendamente particular entre los más pequeños, y que cursa -además- con otros síntomas similares a los de un resfriado común o una gripe.
Aunque a veces asociemos las uñas encarnadas a los adultos, lo cierto es que es un problema que también se encuentra en la infancia. Y es que, tanto para mayores como para pequeños, es algo bastante doloroso porque por los pies pasan gran cantidad de nervios. Te damos algunas pautas para prevenir esta dolencia:
La penicilina es uno de los medicamentos más utilizados en niños, al ser un antibiótico útil contra infecciones bacterianas. Pero, en ocasiones, puede causar reacciones alérgicas.
La escarlatina o fiebre escarlata no es una enfermedad que haya desaparecido, lejos de lo que se pensaba en los últimos años se siguen dando casos de esta infección en nuestro país.
Los niños cuando llegan a la guarde atraen infecciones víricas como las alfombras blancas las manchas de tomate, o sea, todas. Hasta las que parecen imposibles.
La clamidia es una de las enfermedades de transmisión sexual (ETS) más frecuentes y, sin embargo, una de las menos conocidas. Puede causar esterilidad tanto femenina como masculina.