Educar para la salud no sólo consiste en prevenir enfermedades sino en conseguir hábitos de conducta que mejoren el estado de bienestar físico, psicológico y social. Los niños deben aprender estos hábitos a edades tempranas para que lo consideren una parte de su vida y no como un sobreesfuerzo que deben realizar para estar sanos.
Comer de manera equilibrada o hacer ejercicio de forma regular no sólo te mantiene sano y en forma, sino que, además, te hace más fuerte mentalmente y ayudar a tener más fuerza de voluntad.
Beneficios del yoga en los niños según la experta
Con las posturas se trabaja, entre otras cosas, el equilibrio –físico y mental– y la concentración. Incluso cuando un niño pierde el equilibrio al quedarse sobre una pierna aprenderá a permanecer en calma y mantenerla para volver a encontrarlo.
Las posturas de yoga ayudan a desarrollar la concentración y una mente clara, ya que al mantener las posturas se intenta enfocar la atención en un punto. Este aspecto ayuda a mejorar la concentración en las actividades escolares, y cada vez hay más colegios que deciden introducir el yoga como una actividad regular.
Ejercicio físico en niños
Los beneficios de la práctica de actividades deportivas en los niños son múltiples: mejora la autoestima, favorece y mejora la atención y concentración, ayuda a controlar el sobrepeso, pero, sobre todo, favorece su bienestar en general.
Lo importante es que sea el niño el que elija a qué actividad deportiva se quiere dedicar y, para eso, hay que ofrecerles múltiples actividades hasta dar con la que más le guste y mejor se adapte a sus características. Es necesario que consideren la práctica regular de deporte como algo divertido y placentero, no como una obligación.

Una alimentación sana en los niños es crucial
En los últimos años han aumentado notablemente el caso de niños con obesidad infantil. Para prevenirla es imprescindible poner en marcha diversas medidas, tanto en el ámbito familiar como en el escolar.
Se debe evitar, en la medida de lo posible, la bollería industrial, dulces y chucherías. En los colegios ya se ofrecen menús equilibrados y adaptados a las necesidades de los niños, partiendo de la pirámide de la alimentación.
Tabaco, drogas y alcohol en niños
La prevención debe empezar desde la infancia. Los especialistas hablan, incluso de empezar antes de que los niños cumplan los diez años. Contarles y advertirles de los efectos nocivos que pueden tener para su salud puede ser un buen comienzo. Las comunidades educativas ya están realizando campañas formativas con respecto a estos malos y perniciosos hábitos.
Prevención de accidentes
Los niños no siempre son conscientes del entorno que les rodea. En este sentido, hay que enseñarles a comportarse de manera segura y ayudarles a esquivar los peligros por sí sólo sin limitarles su necesidad de movimiento ni generales miedos.
En este sentido, la educación vial –en la que cada vez más colegios están implicados– cobra un lugar destacado. Respetar los pasos de cebra, la importancia del cinturón de seguridad y conocer cómo deben comportarse como peatones es crucial para prevenir accidentes.