Cuando una mujer sabe que va a ser madre, siente así como una sensación de alegría y miedo a partes iguales, una total dicotomía de sentimientos, aunque no serán los únicos que tendrá. El futuro que está en camino es algo que lógicamente le preocupa, por eso el pensamiento sobre el conseguir estar a la altura de todos los retos que van a ir apareciendo se pasará por la mente de la futura mamá unas cuantas veces. En especial, de las que son primerizas.
Si ahora mismo este es tu caso, lo primero que debes saber es que tienes que estar tranquila, porque todo eso que estás sintiendo es totalmente normal. Lo segundo es que, sabiendo esto, lo mejor que puedes hacer es calmarte, cuidarte y seguir los consejos de los especialistas que sabrán guiarte de buena manera.
No obstante, como las inquietudes que aparecen cuando vas a tener un hijo son bastante numerosas, pero también muchas de ellas comunes, aquí tienes algunas de las más frecuentes para ayudarte a prepararte a ser madre por primera vez.
Cuidado del embarazo
Primero que todo, aunque suene obvio, es cuidar tu gestación. Para ello pon atención a tu alimentación, acude a todas las revisiones con tu médico, no fumes ni tomes alcohol y haz ejercicio regularmente, aunque siempre teniendo en cuenta tu estado. Aquí puedes ver algunas actividades recomendadas para embarazadas.
La salud emocional
Como es natural en el cuerpo de la mujer, durante el embarazo se produce una auténtica revolución hormonal. Y estos cambios hormonales afectan emocionalmente. Sin embargo, en el caso de sentir que te sobrepasan algunos sentimientos, lo más recomendable es que hables con tu pareja para que pueda entender cómo te sientes, que consultes con tu ginecólogo, o que acudas a un psicólogo perinatal, seguramente te ayudará enormemente.
El miedo al parto
Sin duda, el miedo por el momento del parto es uno de los mayores temores entre las mujeres gestantes que nunca han pasado por ello. Ya no solo por la angustia al dolor, sino también por el querer mantener el bienestar del bebé siempre. Sin embargo, hay que pensar que las mujeres están preparadas por naturaleza para dar a luz y que en la gran mayoría de partos no aparecen complicaciones.
Como recomendación según avance el embarazo es que tengas lista tanto la canastilla del bebé como la tuya ya desde el segundo trimestre de gestación. Nunca sabes cuando la necesitarás y no dejarlo para última hora también te dará calma y seguridad.
La preocupación por la lactancia
Seguramente esta sea otra cuestión que se haya pasado por tu mente y te haya provocado preocupación. No obstante, como en el caso anterior, debes pensar que las mujeres, como mamíferos, tenemos la capacidad tanto de alimentarnos como de alimentar con leche materna, por lo que no tendrás problema con ello. No obstante, en el caso de surgir alguna complicación o simplemente que optaras por no hacerlo, recuerda que existen leches de fórmula con las que tu hijo se nutrirá perfectamente.
Las necesidades del bebé
Otro punto que puede preocuparte es el hecho de no saber entender a tu hijo, el que en un principio solo se comunicará con su llanto. Aunque a veces pienses que no lograrás entender el motivo de sus lágrimas, lo cierto es que poco a poco aprenderás a diferenciar sus necesidades.
El sueño del pequeño
Esta cuestión también es un clásico entre clásicos, de hecho, seguro que se te ha pasado por la mente pensar si tendrás la energía suficiente para aguantar las noches sin dormir que te esperan. Pero tranquila, aunque al principio se despierte más asiduamente, paso a paso irá acostumbrándose a los patrones de sueño y estará más predispuesto a dormir durante la noche.
Si te queda alguna inquietud al respecto, que seguro que sí, de lo que no tengas ninguna duda es que conseguirás disfrutar de la maternidad.