La inseguridad es una de las características más habituales en la infancia, entendida esta como falta de confianza en uno mismo. El psicólogo infantojuvenil Javier de Haro dedica un post divulgativo reciente publicado en Instagram a este aspecto en el que destaca hasta diez indicadores evidentes que son señales de alerta y detección de que existe inseguridad en el menor.
Es una lista muy concreta de rasgos de la personalidad y comportamientos que el psicólogo describe en muy pocas palabras con precisión. Puede serte de mucha ayuda, así que la reproducimos tal cual a continuación.
Estos son, según Javier de Haro, los diez indicadores de la inseguridad en la infancia:
- Lee cuesta mirar a los ojos
- Al hablar, titubea o lo hace en voz baja
- Duda o le cuesta tomar decisiones
- Se frustra muy fácilmente
- Tiene mucho miedo a equivocarse. Prefiere no hacer a poder fallar
- Es muy dependiente del adulto
- Busca constantemente aprobación
- Se infravalora o verbaliza que no puede o que no lo va a conseguir
- Tiene muchos miedos. Le cuesta afrontar cosas.
- Cuando hay un conflicto, le cuesta mucho defenderse

Para el psicólogo, “es importante estar atentos” a si se producen estos indicadores en tu hijo o hija porque la inseguridad o falta de confianza “puede afectarle a muchos niveles”. Por ejemplo, cita Javier de Haro el autoestima, el aprendizaje o la socialización.
Según Javier de Haro, es especialmente importante acompañar y ayudar al menor “sobre todo cuando interfiere (la inseguridad) negativamente en su día a día y no se trata de algo puntual“.
Consejos para ayudar a un niño o niña inseguro
En el mismo post divulgativo, el psicólogo infantojuvenil comparte hasta cinco consejos para acompañar y ayudar a nuestros hijos e hijas cuando padecen falta de confianza en sí mismos de manera continuada.
En primer lugar, el psicólogo recomienda ayudarle “a tolerar el error y verlo como parte del aprendizaje”. Para ello, aconseja marcarle objetivos más allá del resultado. “Refuerza aspectos como la actitud o el esfuerzo y juega a muchos juegos con él: aprender a perder es parte del proceso”, dice.
En segundo lugar, recalca el impacto positivo de potenciar su autonomía. “La autoestima está muy ligada al saber hacer sus cosas y resolver sus problemas (podemos ayudarle pero tiene que implicarse), y eso repercute en una mayor seguridad”, explica de Haro.

Por otro lado, propone plantearles retos a los peques inseguros. Retos, matiza, que sean “alcanzables”. Lo ideal, añade, es empezar por cosas fáciles e ir saliendo de su zona de confort. “El que aprenda a no evitar es fundamental”, asegura el psicólogo.
Otro consejo de Javier de Haro es preguntarle qué piensa en esos momentos en los que busca aprobación. Así, dice el psicólogo, le ayudarás “a entender que es su propia aprobación la más importante”.
Y en quinto y último lugar, Javier de Haro aconseja que ayudemos a nuestros hijos e hijas a socializar con sus iguales. ¿Cómo? Pasando tiempo en el parque o con actividades extraescolares que no sean muy competitivas y que se ajusten a sus intereses. “Afrontar situaciones sociales con un carácter más lúdico o donde no se sienta evaluado le va a dar muchas ‘tablas’ a la hora de resolver conflictos, ‘defenderse’ o, simplemente, adquirir habilidades sociales”, concluye el psicólogo infantojuvenil.