Atención, padres: aunque esté apagado, la presencia del teléfono móvil reduce la capacidad cognitiva

La ciencia ha demostrado el impacto negativo que supone la sola presencia física de un teléfono móvil. Y advierte también de los beneficios de desconectar la conexión a internet de estos aparatos.
Estudios recientes muestran que el rendimiento cognitivo baja significativamente cuando un móvil está cerca, incluso si no se usa. El efecto es más acusado en tareas que exigen concentración o interacción emocional.
Estudios recientes muestran que el rendimiento cognitivo baja significativamente cuando un móvil está cerca, incluso si no se usa. El efecto es más acusado en tareas que exigen concentración o interacción emocional (Midjourney-RG)

En la era digital actual, los teléfonos móviles inteligentes se han convertido en una extensión de nosotros mismos, ofreciendo acceso constante a información, entretenimiento y conexiones sociales. Sin embargo, esta conectividad ubicua viene con un costo, y la preocupación pública sobre cómo los teléfonos inteligentes afectan la función cognitiva y la salud mental es generalizada. Como padres, nos preocupa sobre todo el uso que nuestros hijos e hijas le dan a estos teléfonos inteligentes y el impacto potencial que tienen en ellos y ellas. Y lo cierto es que es tal su influencia que incluso cuando están apagados, su sola presencia, ya puede tener un impacto significativo en nuestra capacidad cognitiva.

Una hipótesis clave al respecto, conocida como el efecto de "drenaje cerebral", postula que la mera presencia de nuestro teléfono inteligente puede ocupar recursos cognitivos de capacidad limitada, dejando menos recursos disponibles para otras tareas y afectando el rendimiento cognitivo.

Esto ocurre porque nuestros cerebros, al percibir el teléfono como un estímulo de alta prioridad (personalmente relevante y siempre presente), destinan recursos atencionales para inhibir la atención automática hacia él. Es un esfuerzo subconsciente para evitar distracciones, pero que igualmente consume energía mental.

Un estudio en profundidad

Un estudio realizado por Ward, Duke, Gneezy y Bos (2017) exploró este fenómeno a través de dos experimentos. Los investigadores manipularon la "saliencia" del teléfono inteligente pidiendo a los participantes que colocaran sus dispositivos en diferentes lugares:

  • En el escritorio y a la vista (alta saliencia).
  • En el bolsillo/bolso y fuera de la vista (saliencia media).
  • En una habitación separada (baja saliencia).

Los resultados del primer experimento fueron reveladores: a medida que aumentaba la saliencia del teléfono inteligente, disminuía la capacidad cognitiva disponible de los participantes. Lo más impactante es que este efecto se observó incluso cuando los participantes no reportaron haber pensado conscientemente en sus teléfonos durante el experimento. La capacidad disminuyó sin que los individuos fueran conscientes de la influencia de sus dispositivos.

Un móvil “durmiendo” en la mesa sigue activo en nuestro cerebro: compite silenciosamente con las tareas cognitivas que realizamos, incluso si está apagado o en modo avión.
Un móvil “durmiendo” en la mesa sigue activo en nuestro cerebro: compite silenciosamente con las tareas cognitivas que realizamos, incluso si está apagado o en modo avión (Midjourney-RG)

Para reforzar estos hallazgos, un segundo experimento abordó la posibilidad de que el drenaje cerebral se debiera a la recepción de notificaciones. Los participantes fueron asignados aleatoriamente a tener sus teléfonos encendidos (en silencio) o completamente apagados. Los resultados replicaron el efecto: la saliencia del teléfono inteligente seguía afectando la capacidad cognitiva disponible, independientemente de si el teléfono estaba encendido o apagado. 

Esto descarta la idea de que la distracción por notificaciones sea el único culpable y subraya que el problema radica en la mera presencia del dispositivo.

Es importante matizar, eso sí, que no se encontró que la "atención sostenida" (la capacidad de mantener el foco en una tarea) se viera afectada por la mera presencia del teléfono, lo que indica que el impacto es más sobre la disponibilidad de recursos cognitivos que sobre interrupciones directas de la atención.

El estudio es una prueba más de la capacidad que tienen el teléfono móvil para influir en los seres humanos, lo cual es clave a la hora de gestionar la relación de estos aparatos con los hijos e hijas adolescentes. 

La capacidad del cerebro para aprender, recordar o resolver problemas se ve mermada cuando hay un móvil cerca. Este “coste cognitivo pasivo” afecta tanto a adultos como a niños, sin que nos demos cuenta.
La capacidad del cerebro para aprender, recordar o resolver problemas se ve mermada cuando hay un móvil cerca. Este “coste cognitivo pasivo” afecta tanto a adultos como a niños, sin que nos demos cuenta (Midjourney-RG)

Quitar la conexión de internet al móvil: un hábito saludable

Los hallazgos sobre el "drenaje cerebral" se complementan con un estudio más reciente y a gran escala de Castelo, Kushlev, Ward, Esterman y Reiner (2025), que proporciona evidencia causal sobre los beneficios de reducir la conexión constante a internet. Dicho otro modo: la ciencia demuestra el impacto positivo de quitar la wifi del móvil.

Este estudio, un ensayo controlado aleatorizado de un mes de duración, utilizó una aplicación para bloquear el acceso a internet móvil en los smartphones de los participantes durante dos semanas. Es importante destacar que la intervención se centró específicamente en el internet móvil, permitiendo a los participantes mantener la conexión móvil (mensajes de texto y llamadas) y el acceso a internet a través de otros dispositivos como ordenadores de escritorio.

Los resultados fueron muy llamativos, ya que demostraron mejoras significativas en diversas áreas psicológicas. Todas ellas tienen un vínculo directo con la adolescencia. 

  • Salud mental: se observaron mejoras en la salud mental de los participantes, una mejora que fue superior al efecto meta-analítico de los antidepresivos y similar al de la terapia cognitivo-conductual en la reducción de los síntomas de depresión.
  • Bienestar subjetivo (SWB): incluyendo la satisfacción con la vida y el afecto positivo, también mejoró significativamente.
  • Atención sostenida: La capacidad objetivamente medida para mantener la atención mejoró, lo que se equipara a un rejuvenecimiento de 10 años en términos de rendimiento cognitivo.

El 91% de los participantes experimentó una mejora en al menos uno de estos tres resultados. Estos beneficios persistieron incluso después de que los participantes pudieran volver a acceder a internet móvil, posiblemente porque su tiempo de pantalla se mantuvo más bajo que antes de la intervención.

Aunque no lo estés usando, tener el móvil a la vista reduce tu capacidad de atención y memoria de trabajo.
Aunque no lo estés usando, tener el móvil a la vista reduce tu capacidad de atención y memoria de trabajo (Midjourney-RG)

No tener acceso a internet cambia los hábitos de vida

Lo interesante del segundo estudio es que encontró que cuando las personas no tenían acceso a internet móvil, cambiaron la forma en que pasaban su tiempo, dedicándole más espacio de tiempo a estos hábitos saludables

  • Más tiempo a socializar en persona.
  • Más tiempo a hacer ejercicio.
  • Más tiempo a estar en la naturaleza.
  • Más tiempo a la lectura.
  • Menos tiempo a consumir medios digitales.

Además de estos cambios en el uso del tiempo, el bloqueo del internet móvil también llevó a mejoras en la conexión social, el sentido de autocontrol y la cantidad y calidad del sueño.

En definitiva, la ciencia sigue enviando señales de alerta a los padres que afrontan ya o lo harán a corto plazo la difícil tarea de guiar a sus hijos e hijas por el universo digital.

Referencias

  • Castelo, N., Kushlev, K., Ward, A. F., Esterman, M., & Reiner, P. B. Blocking mobile internet on smartphones improves sustained attention, mental health, and subjective well-being. PNAS Nexus, Oxford University Press on behalf of National Academy of Sciences, 2025. DOI: https://doi.org/10.1093/pnasnexus/pgaf01712
  • Ward, A. F., Duke, K., Gneezy, A., & Bos, M. W. Brain Drain: The Mere Presence of One’s Own Smartphone Reduces Available Cognitive Capacity. Association for Consumer Research, 2017. DOI: http://dx.doi.org/10.1086/691462

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