El ministerio de Juventud e Infancia ha abierto una audiencia pública para regular las bases del nuevo Premio Nacional del Juguete, suprimiendo el galardón actual más parecido, denominado Premio Nacional de Fomento de la Creatividad en el Juguete, que entregaba el ministerio de Cultura. Además de asumir su entrega, el ministerio apuesta por actualizar los requisitos del premio.
El ministerio de Juventud e Infancia, que recientemente ha propuesto rebajar la edad para votar en las elecciones a los 16 años, trabaja en la regulación de las bases del Premio Nacional del Juguete. Para ello, ha emitido una orden que pretende modificar la del año 95, que es el documento que ampara los Premios Nacionales que otorga el Ministerio de Cultura.
Dentro de estos premios se incluye desde su creación en 2011 el Premio Nacional de Fomento de la Creatividad en el Juguete, cuya dotación económica era de 30.000 euros.
Una vez se aprueba la orden, que está sometido a audiencia pública hasta el 14 de febrero, el ministerio de Juventud e Infancia asumirá el fallo y entrega del nuevo Premio Nacional del Juguete, que además contará con requisitos actualizados en relación a los que se tenían en cuenta para el antiguo premio del ministerio de Cultura.

Premiar a los juguetes que potencien valores contemporáneos
En la citada orden para regular las bases del Premio Nacional del Juguete, el ministerio de Juventud e Infancia expone que “en los últimos años, el juguete ha ido adquiriendo un gran reconocimiento como elemento que, manteniendo unas bases atemporales en su configuración, experimenta a su vez una continua evolución paralela a los cambios sociales”. Ahí está el caso de juguetes como la Barbie con síndrome de Down y otras versiones inclusivas que la muñeca ha lanzado a lo largo de su historia.
En este sentido, la cartera de Juventud e Infancia defiende que los juguetes, “además de tener un impacto significativo en el desarrollo cognitivo y emocional de niñas y niños, han de ser seguros y transmitir valores acordes con los consensos sociales”. Y continúa el ministerio: “(el juguete) juega un papel fundamental en la promoción de los principios y objetivos que se aspira alcanzar como sociedad, como igualdad entre hombres y mujeres o la erradicación de formas de violencia como son el racismo o la LGTBIfobia”.
Por todo lo expuesto, el ministerio de Juventud e Infancia, que va a reformar la ley de protección a la infancia para prohibir el síndrome de alienación parentalxx considera pertinente asumir las competencias de este premio, ya que es también quien “asume las políticas públicas en materia de infancia y juventud”. Así, indica el ministerio, se reconocerá en el juguete “los diversos elementos que lo configuran como objeto esencial en un tramo de la vida crucial para el desarrollo de las personas y de la ciudadanía, sin desvincularlo de su componente cultural”.
Hasta el 14 de febrero se podrán registrar opiniones y sugerencias a los aspectos planteados por el Gobierno sobre las bases reguladoras del Premio Nacional del Juguete, cuya creación supondrá la supresión del Premio Nacional de Fomento de la Creatividad en el Juguete.

Últimos ganadores del Premio del Juguete
Como decíamos anteriormente, el Premio Nacional de Fomento de la Creatividad en el Juguete, embrión del próximo Premio Nacional del Juguete, se creó en 2011 al amparo de los Premios Nacionales del Ministerio de Cultura. Su dotación económica eran 30.000 euros.
En 2022, fue Josep María Joan Rosa la persona en quien recayó el galardón. Rosa creó la Fundació Museu del Joguet de Catalunya, a la que él y su esposa, Pilar Casademont Sadurní, donaron su colección de juegos y juguetes.
Es el fundador del Museu del Joguets de Catalunya en colaboración con Lluís Durán, espacio que abrió sus puertas en 1982 bajo la dirección del Premio Nacional de Fomento de la Creatividad en el Juguete.
En 2023, último año de estos premios, el jurado reconoció a Paola Reina, de Muñecas Paola SL, una marca de fabricación de muñecas artesanales de alta calidad originarias de Onil, un pueblo del valle alicantino del juguete.
Estas muñecas, defiende la empresa, se caracterizan por un proceso artesanal que “asegura que cada pieza sea única”, con una “selección de materiales de alta calidad” y una “vestimenta cuidadosamente confeccionada”.