Aunque las altas capacidades intelectuales no suelen diagnosticarse hasta los 6 años, coincidiendo más o menos con el paso a primaria, las estadísticas dicen que la precocidad intelectual en el ciclo de educación infantil es una pista muy fiable. Así lo afirman Anaïs Rodríguez y Mari Carmen Gutiérrez, del gabinete psicológico Altascapaciqué, que está especializado en altas capacidades intelectuales.
La precocidad intelectual, explican las dos psicólogas, “es un fenómeno evolutivo en el que niños y niñas en edad temprana adquieren hitos intelectuales o psicomotrices mucho antes de lo esperable”. Esta es una etapa en la que la inteligencia está en plena evolución, en la que “no se ha cristalizado”, puntualizan ambas expertas en altas capacidades, pero la precocidad suele tener mucho que ver con estas.
En concreto, según Anaïs Rodríguez y Mari Carmen Gutiérrez, las estadísticas señalan que alrededor de un 97% de estos peques precoces intelectualmente en la etapa de 0 a 6 años presentan en un futuro altas capacidades.
Algunos indicadores de la precocidad intelectual
Las dos psicólogas comparten en un post divulgativo publicado en Instagram algunos de los indicadores que pueden indicar que un niño o niña en educación infantil es precoz intelectualmente hablando. Eso sí, “ten en cuenta que sólo son indicadores, no tienen que presentarlos todos ni el hecho de que presenten algunos quiere decir que nuestros hijo o hija tenga altas capacidades”, matizan.
Aclarado este detalle que no es menor, Anaïs Rodríguez y Mari Carmen Gutiérrez enumeran hasta 22 indicadores relacionados con la precocidad intelectual en la etapa de infantil y, por ende, con las altas capacidades intelectuales.

Los 22 indicadores son los siguientes:
- Tienen un vocabulario inusualmente avanzado.
- Son niños y niñas que se expresan con fluidez.
- Son curiosos y observadores. Preguntan mucho.
- Tienen destreza para el deporte. Saltar, montar en bici…
- Intereses muy diversos o muy marcados.
- Interaccionan más con adultos o con niños mayores.
- Creatividad: presentan muchas formas de resolver problemas.
- Inician la lectoescritura muy pronto y de manera autodidacta a veces.
- Tienen una gran memoria a corto o largo plazo. A veces, se dan casos de memoria eidética, que es “la capacidad de recordar objetos, sonidos o imágenes con un nivel de detalle muy alto”, explican Anaïs Rodríguez y Mari Carmen Gutiérrez.
- Tienen gran capacidad de influencia en los demás. Son convincentes.
- Usan la imaginación y la fantasía para aprender y explorar.
- Suelen presentar una buena psicomotricidad fina.
- Muestran muy pronto una gran empatía, incluso sufriendo en exceso si alguien cercano sufre.
- Disfrutan aprendiendo por el mero hecho de aprender.
- Comprenden conceptos numéricos avanzados.
- Intensidad emocional: a veces reaccionan de forma exagerada, por ejemplo, a películas de miedo o tristes.
- Habilidad para contar una historia con gran detalle.
- Les preocupan muy pronto temas como el sentido de la vida, la muerte, nuestro origen…
- Son persistentes en las tareas que les interesan.
- Ideas a veces poco usuales.
- Realizan tareas difíciles para su edad.
- Hace muchas preguntas y comentarios sugerentes.

Mitos relacionados con la precocidad intelectual
En el mismo post divulgativo, las psicólogas de Altascapaciqué comparten no solo indicadores que son compatibles con la precocidad intelectual en la etapa de educación infantil y con la condición neurológica que explica las altas capacidades intelectuales.
Anaïs Rodríguez y Mari Carmen Gutiérrez también advierten de que hay una serie de mitos relacionados con estas cuestiones que están muy extendidos cuando afectan a peques en edades tempranas.
Por ejemplo, rechazan la idea de que todos los niños y niñas sean precoces en esta etapa de los 0 a los 6 años. Y lo mismo hacen con esa afirmación que se escucha a menudo en corrillos de padres y madres de que “luego todos se igualan”.
Del mismo modo, las dos psicólogas recalcan que no es verdad que en la etapa de educación infantil no haya que hacer adaptaciones curriculares si se detecta la necesidad en algún alumno o alumna por el mero hecho de que no sea educación obligatoria o porque se tenga la idea equivocada de que no las necesitan.
Y también señalan como mito a desterrar la idea de que la precocidad se debe únicamente a la alta estimulación en casa, otra de las afirmaciones que se escuchan mucho en parques y demás espacios con peques en los que participan personas que no son expertas en lo que se está tratando.