Cómo enseñar resolución de conflictos a través de las emociones

Enseña a tus hijos a resolver sus propios problemas.
Habilidades para resolver conflictos

Los conflictos son una parte normal de la vida de los niños e intentar evitarlos o que no se enfrenten a ellos sólo es un gran error, ellos deben aprender a lidiar con los conflictos y aprender a resolverlos de la mejor forma posible. Tener diferentes necesidades o deseos, querer algo cuando no es posible… puede conducir rápidamente a que un niño sienta un conflicto interno. “Quiero el juguete de mi hermana”, “ella no me deja jugar”, “me ha quitado el coche”, “me ha dicho tonta”, "no quiere compartir conmigo", etc. Estas son algunas de las muchas frases que los niños dicen cuando entran en conflicto pero no saben resolverlo.

Si bien es cierto que a todos los padres nos gustaría proteger a nuestros pequeños en una burbuja donde no pudieran sentir dolor, ni malestar, ni que otros les hicieran daño… eso no solucionaría nada ni les ayudaría en su crecimiento. Al igual que nosotros, es vital que los niños aprendan a resolver los conflictos por sí solos.

Los niños necesitarán que sus padres sean sus guías, que les enseñen cuál es el camino que deben seguir sin que les resuelvan los problemas por ellos, simplemente que les eduquen a hacerlos y que se queden como espectadores, hasta ver y descubrir, que sus hijos, también pueden hacerlo.

Habilidades para resolver conflictos - mdjaff/Freepik

Enseñar la resolución de problemas a través de las emociones

La mayoría de las veces, una vez que los niños (y adultos) sienten que sus emociones han sido comprendidas y aceptadas, los sentimientos más intensos pierden su carga y comienzan a disiparse. Esto deja una apertura para la resolución de problemas y para la tranquilidad emocional. A veces, los niños pueden hacer esto por ellos mismos y otras, no. En la mayoría de los casos, necesitarán tu ayuda para poder hacer una lluvia de ideas en la resolución del conflicto que está ocurriendo. Sobre todo, ayúdalos a poner en palabras la emoción que están sintiendo y de qué manera la están expresando, y si habría otra forma de expresarla que le haga sentir mejor.

Como padres, hay que controlar el impulso de querer resolver el problema aunque te lo pidan. Si le resuelves cualquier conflicto le estarás transmitiendo el mensaje de que no tienes confianza suficiente en ellos para que manejen las cosas. Tus hijos deben verte y sentirte como su apoyo, como su guía… Y así sentir que además de tenerte, ellos son capaces de resolver cualquier conflicto que se le ponga por delante, tengan la edad que tengan.

Educar a los niños para tener buenas habilidades de resolución de conflictos en la vida

Muchas veces los niños tienen un mal comportamiento porque se frustran y tienen sentimientos de impotencia difícil de manejar. Si los niños tienen las herramientas necesarias para resolver las cosas por su cuenta, se comportarán mejor y te contarán lo bien que lo han hecho. Hay algunas formas a tener en cuenta en la educación diaria de los niños.

Fomentar el pensamiento crítico

Para fomentar el pensamiento crítico de un niño es tan fácil como dejarle que tome sus propias decisiones siempre que puede. Por ejemplo, cuando tenga edad suficiente deberás preguntarle qué prefiere ponerse entre dos piezas previamente elegidas por ti para ese día, por ejemplo: “¿Prefieres el jersey verde o el azul?” o quizá también otras cosas diarias como: “¿Qué prefieres para desayunar, pan o galletas?”

Cuando los niños aprenden a manejar estas pequeñas decisiones diarias, podrás llevarle a otro nivel y si por ejemplo está peleando con su hermana por un juguete le puedes preguntar con calma: “¿Cómo podrías resolver esto de otra forma en la que los dos estuvierais contentos?”. Cuando a los niños se les da la oportunidad de decidir, pueden tomar decisiones muy acertadas con o sin tu ayuda.

Potenciar un buen razonamiento

Es muy importante que en la educación de tus hijos, puedas fomentar siempre el pensamiento y el razonamiento de los pequeños. Por ejemplo, cuando un niño te pregunta cómo tiene que hacer algo y quiere una respuesta rápida para no pensar y que sea más fácil, es necesario que le devuelvas la pregunta para que esté obligado a razonar. Por ejemplo, si te pregunta cómo se hace algo, pregúntale tú cómo cree que debería hacerse. La respuesta que te dé te dirá cuál es la capacidad que tiene para entender las cosas y cuál es el grado de ayuda que necesita por tu parte para poder resolver el conflicto de forma satisfactoria.

Fomentar el esfuerzo y la persistencia

Es cierto que para muchos padres es más fácil hacer las cosas por los hijos para ir más rápido, sobre todo cuando hay un tiempo limitado y el reloj corre rápidamente. Pero es muy importante dejar a los niños pequeños que hagan las cosas por sí mismos aunque tarden más y debas tú trabajar la paciencia. Los niños necesitan práctica para poder aprender a hacer las cosas y además, poder dominarlas. Enséñale a guardar los juguetes, a ordenar los calcetines, o atar sus zapatos… y después deja que lo haga él solo sin tu ayuda, a no ser que la requiera. Así, cuando tenga un conflicto interno podrá buscar la forma de poder solucionarlo por sí mismo y pedir ayuda únicamente cuando realmente sea necesario. Es bueno que los niños aprendan a enfrentarse a los obstáculos para intentar vencerlos.

Resolución de conflictos

Cómo resolver los conflictos fomentando la Inteligencia Emocional

La Inteligencia Emocional es fundamental para que los niños aprendan a resolver los conflictos desde una perspectiva sin victimismos y con compromiso de cambio. Para ello, los padres deben tener en cuenta algunos puntos claros sobre esto:

  • Los niños necesitan expresar sus sentimientos, pero también necesitan saber cómo cambiar lo necesario para encontrar soluciones constructivas a los problemas. Eso requiere práctica y modelado por parte de los padres.
  • Es necesario enseñar a los niños a entender sus sentimientos como señales sobre cosas que necesitan para cambiar en sus vidas y esto, les da poder a los niños y se sentirán capaces de mejorar su entorno más cercano para sentirse mejor.
  • Todos los niños necesitan aprender a expresar sus necesidades sin atacar a otra persona.
  • Como padres y madres, es importante ser conscientes de que los niños imitan a sus padres y que es imprescindible ser un buen ejemplo diariamente.

Consecuencias de no tener habilidades de resolución de conflictos

Cuando un niño no tiene las estrategias adecuadas para resolver un conflicto suele tener un comportamiento negativo y recurren a las discusiones e incluso a las agresiones físicas. Aunque también puede haber otro tipo de respuesta más pasiva evitando el conflicto.

En ambas circunstancias, la autoestima del niño se puede ver gravemente perjudicada puesto que siente emociones negativas ante el conflicto difíciles de manejar para él, algo que deben enseñar los padres a los niños. Además su aprendizaje y su relación con los demás también pueden verse perjudicado, por todo esto es necesario que los niños aprendan habilidades de resolución de conflictos. Al aprender a manejar el conflicto de forma efectiva, podrán llevarse mejor con los demás y que su autoestima y aprendizaje social se vea fuertemente reforzado. 

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