La llegada de la primavera es sinónimo de celebraciones al aire libre disfrutando del buen tiempo y del clima. Cada fin de semana, los parques de las ciudades y alrededores se llenan de niños que se reúnen para disfrutar de cumpleaños, y con ellos llegan los globos y las mesas repletas de refrescos, comida y por supuesto, chucherías, dulces y tartas que no siempre son la mejor opción para su salud.
España ocupa el tercer lugar en cuanto al índice de obesidad infantil y juvenil en Europa según las OMS, y las cifras no dejan de aumentar. Además del sedentarismo, otro de los factores que más influyen en el sobrepeso de la infancia son los hábitos alimenticios, por lo que conviene establecer unas recomendaciones sencillas de seguir para convertir esas costumbres en saludables y equilibradas para ellos.
Una fiesta de cumpleaños no tiene por qué estar reñida con una merienda saludable y apetecible y con la que los niños queden más que satisfechos y felices. Es verdad que lo más sencillo, y por lo que se sentirán atraídos, son las patatas fritas, los gusanito, los refrescos y las chuches de todo tipo, pero es responsabilidad de los padres ofrecerles alternativas que les abran los ojos a todo un mundo de posibilidades sanas para su organismo y su bienestar. ¡Es solo un hábito más!
Snacks salados para todos los paladares
En primer lugar, podemos sustituir los snacks procesados por otros sanos como chips de kale o snacks de queso. También podemos elaborar en casa cremas como el guacamole o el hummus para mojar esos snacks, o acompañarlos de palitos de zanahoria o pan integral. Si a esto añadimos una tortilla de patata casera o una empanada hecha por nosotros seguro que ya les vamos saciando el apetito después de un rato de juegos y diversión.
Los tomates cherry o un puñado de frutos secos también pueden ser una buena opción. Si el cumpleaños se celebra en casa o el lugar elegido lo permite, una gran idea es hacer una barbacoa. No hace falta privarles de sus queridas hamburguesas. Con una mezcla de una carne de la mejor ternera, queso, pan sin gluten y tomate seguro que se chupan los dedos. Otra alternativa a la hamburguesa son las brochetas de pollo ecológico o pinchos de secreto ibérico.
Después de haber jugado durante horas, los niños además de hambre tendrán una sed desbordante. Lo mejor es saciarla con agua natural y después ofrecerles otras alternativas como batidos naturales sin azúcar añadido o agua saborizada con frutas naturales, seguro que descubren nuevas texturas para su paladar que pedirán repetir en su dieta diaria.
¿Existen las golosinas buenas y apetecibles?
Una fiesta de cumpleaños no se puede dar por terminada sin el deseado “momento dulce”. Lo mejor es elegir chocolates sanos y postres caseros, que además podemos acompañar con fruta presentada en forma de brochetas, smoothies de colores, muy atractivos para los ojos de los más pequeños o chips de manzana o de plátano, entre otros muchos ejemplos.
Un acierto seguro es hacer una brocheta con trocitos de fresa y plátano, regada con un chocolate saludable derretido. Si a todo esto le añades unos vasitos de yogur ecológico, no sabrán por qué postre decidirse. Este alimento es además uno de los probióticos más efectivos que existen y que fortalece su sistema inmunitario.
A la hora de soplar las velas, podemos aprovechar para cocinar con ellos una tarta casera y decorarla como más les guste con ingredientes saludables. Por ejemplo, una tarta de manzana macerada con zumo de limón o la clásica de galletas y chocolate con la que además disfrutarán en su elaboración. En vez de utilizar las típicas galletas industriales, podemos hacerlas con nuestras propias manos y el chocolate, recordemos, siempre natural sin azúcar ni edulcorantes añadidos.
Todos estos consejos acompañados de una buena música, juegos, concursos, regalos y alguna que otra sorpresa para el cumpleañero y sus amigos harán de esta fiesta un evento inolvidable.
Artículo elaborado por Niklas Gustafson, experto en nutrición y chairman de Natruly