El colegio concertado Montecastelo de Vigo, en la provincia de Pontevedra, ha decidido implantar en sus calendarios académicos durante todo el curso una actividad obligatoria en la que todos los alumnos deberán hacer la asignatura home skills, un gesto que se propone con el fin de hacer realidad el plan de igualdad en los colegios de la Xunta.
Hemos hablado personalmente con el director de la escuela, José Manuel Rodríguez Lago, para que nos cuente con más detalle sobre esta propuesta que ha implantado la dirección educativa.
3º de la ESO, el mejor curso para aprender tareas del hogar
Uno de los principales motivos que el director nos advierte de que 3º de la ESO es el mejor año para enseñar este tipo de herramientas, es porque es una edad en la que "los alumnos son los suficientemente maduros para usar la plancha, un taladro, o herramientas de bricolaje".
En tercero de la ESO, los alumnos comienzan a experimentar lo que se denomina el aprendizaje autónomo -abalado por el Instituto de Cervantes- donde el profesor, a pesar de ser su consejero, pasa a un segundo plano, ya que es un momento en el que el niño se hace cargo de su propio aprendizaje. Las actividades que ofrece la escuela en esta actividad obligatoria son: "cocina, plancha, costura, uso de electrodomésticos y bricolaje en el hogar".
Un punto a favor es que el desarrollo de esta actividad, no interfiere en la educación de los alumnos. Es entre las actividades extraescolares se encuentra las home skills. José Manuel detalla que "cada trimestre pasa un grupo de 10 alumnos, de modo que al cabo de los tres trimestres pasan los 30". De esta forma, ningún alumno se queda sin extraescolares complementarias, como "robótica, diseño 3d, radio, tv, teatro, poesía, música, etc...", asegura la dirección.

Una tarea que comienza en el colegio y se pone en práctica de forma directa en casa
El director comenta que el colegio también debe ser el encargado de ayudar en la educación a los padres, los primeros responsables de sus hijos. Por eso, esta tarea semanal y trimestral es un empujón para que "en casa se deba poner en práctica estas tareas, al igual que todas las demás".
Desde la dirección argumentan que "la asociación de padres la que colabora con el colegio para sacar adelante esta actividad, junto con algún profesor voluntario". De esta forma, se puede demostrar que esta iniciativa es una tarea en la que se implican los padres también a través de la enseñanza.
El director asegura que "los alumnos al principio se lo toman con cierta desconfianza, pero en cuanto empiezan les encanta". Comienzan con la cocina, siendo un punto a favor a la hora de motivar a seguir esta tarea. Respecto a los padres, "también les gusta, ya que los profesores que las imparten salen de sus filas y de otro modo, les da la oportunidad de continuar con estas actividades domésticas en casa".
Una forma de enseñar la igualdad de género
El colegio ha puesto esta actividad sobre la mesa con un fin: enseñarles lo que es la igualdad de género en el hogar y romper con los roles. Además, de este colegio, existen otros centros escolares, como el colegio Giner de los Ríos de Málaga, que ofrecen este tipo de actividades a cualquier alumno de primaria con algún tipo de discapacidad, TEA u otras necesidades especiales, y así poder desarrollar rutinas básicas de las tareas del hogar.