Este domingo, Madrid no ha sido escenario de una competición deportiva tradicional. Ha sido mucho más. Más de 8.000 personas, entre familias, jóvenes, mayores, madres, padres e incluso niños pequeños en cochecito, tomaron las calles de la capital en la XI Carrera Contra la Violencia de Género, una iniciativa que transforma el correr en una declaración colectiva: no hay lugar para la violencia en una sociedad que avanza unida.
Y aunque todas las miradas estaban puestas en ese mensaje de compromiso, hubo un protagonista inesperado que también captó la atención en plena Castellana: el nuevo Peugeot E-3008. No con estridencias ni con rugidos de motor, sino con la silenciosa presencia de un diseño futurista que acompañó la jornada con una propuesta muy clara: un futuro más justo también se construye sobre ruedas limpias, silenciosas y responsables.
Una carrera donde lo importante es avanzar juntos
La jornada comenzó temprano, con el Paseo de Recoletos como punto de partida y la Plaza de San Juan de la Cruz como meta simbólica de un recorrido de cinco kilómetros. Pero lo verdaderamente inspirador no fue la distancia, sino el mensaje que envolvía cada paso: “Compromiso real: apoyo y concienciación”.
Bajo ese lema, la carrera se convirtió en un encuentro multigeneracional lleno de energía, color y emoción. Mientras algunos corrían con ritmo, otros caminaban tomados de la mano o empujaban carritos de bebé. Lo esencial era estar. Participar. Visibilizar. Porque educar en igualdad, desde la infancia, también se hace en las calles. También se hace así: poniendo el cuerpo en movimiento para defender el derecho a vivir sin miedo.
Además del recorrido, la jornada incluyó talleres, música, actividades infantiles y espacios de encuentro. Todo en un ambiente festivo, empático y profundamente humano.

Peugeot E-3008: diseño que inspira, compromiso que se mueve
Entre pancartas, camisetas con lemas y miradas decididas, hubo un vehículo que despertó interés por su elegante presencia: el nuevo Peugeot E-3008. No era una estrategia publicitaria más. Era un gesto bien pensado. En un contexto donde la movilidad también habla de valores, la presencia de este SUV eléctrico tenía sentido.
Diseñado sobre la nueva plataforma STLA Medium del grupo Stellantis, este modelo marca un punto de inflexión en la estrategia eléctrica de la marca francesa. En Madrid se presentó la versión con motor de 210 CV y tracción delantera, pero el E-3008 también estará disponible en versiones más potentes:
- 230 CV Long Range, con hasta 700 km de autonomía para quienes no quieren preocuparse por la carga en viajes familiares.
- 320 CV con tracción total, para quienes buscan más potencia y versatilidad sin renunciar a la sostenibilidad.

Todo ello alimentado por baterías de alto voltaje de 73 o 98 kWh, que permiten recargas rápidas del 20 % al 80 % en menos de 30 minutos. Algo que, sin duda, muchas familias agradecerán cuando los viajes incluyan paradas, meriendas, cambios de pañal o pequeños contratiempos que transforman una ruta en una aventura cotidiana.
Y es que, en el universo Peugeot, hay dos SUV con autonomías perfectas para viajes largos, capaces de adaptarse al ritmo de una vida en movimiento, con niños, maletas, planes improvisados y mucha energía que gestionar.

Un interior pensado para el confort, la sostenibilidad y la conexión
Más allá de su impecable silueta fastback y su parrilla sin marco, el E-3008 es un vehículo que invita a mirar hacia adelante. Literalmente. Su nuevo Panoramic i-Cockpit® es una pantalla curva y panorámica de 21 pulgadas, suspendida sobre el salpicadero, que fusiona instrumentación y multimedia con una estética envolvente y funcional.
Pero lo que lo hace realmente especial, sobre todo para familias, es su interior ético y pensado al detalle:
- Materiales reciclados y textiles sin cuero animal.
- Diseño limpio, ergonómico y luminoso.
- Amplio espacio para pasajeros y equipaje, perfecto para familias que llevan “la casa a cuestas”.
En términos de conectividad, el sistema Peugeot i-Connect® Advanced ofrece lo que cualquier madre o padre agradecerá: navegación inteligente, actualizaciones automáticas, control por voz y compatibilidad inalámbrica con Apple CarPlay™ y Android Auto™. Todo pensado para que el coche no sea un reto, sino un apoyo.

Una presencia que comunica valores
En un contexto social tan significativo como la Carrera Contra la Violencia de Género, la participación del Peugeot E-3008 no fue un mero acto de marketing. Fue una alianza silenciosa con un movimiento que apuesta por el cambio. Porque hoy más que nunca, las marcas que se comprometen no solo hablan de prestaciones, sino de principios.
Además de este modelo, Peugeot continúa ampliando su gama electrificada con propuestas que responden tanto al corazón como a la razón:
- Estos SUV híbridos enchufables pueden recorrer 100 km sin gastar combustible, una opción eficiente y sostenible para familias que buscan lo mejor de los dos mundos.
- 3008 Hybrid y 5008 Hybrid, dos SUV con etiqueta Cero, diseño elegante y gran autonomía eléctrica.
- Vehículos pensados no solo para las carreteras, sino para la vida: esos trayectos al cole, las compras del día, las escapadas improvisadas.

La movilidad también educa: un paso más hacia el cambio
La XI Carrera Contra la Violencia de Género no es un evento aislado. Es parte de un movimiento que crece, que educa, que emociona. Y que cuenta con el apoyo de instituciones como el Ministerio de Igualdad, la Comunidad de Madrid y marcas privadas que entienden que participar en la transformación social es una responsabilidad, no una opción.
Los fondos recaudados han servido, en ediciones anteriores, para financiar programas de asistencia a víctimas, campañas de sensibilización y talleres educativos en escuelas. Porque la prevención empieza desde la infancia, con una conversación en casa, con un cuento, con un ejemplo. Y sí, también con un paseo por el centro de Madrid un domingo por la mañana.

Conducir con conciencia, llegar con sentido
La imagen del Peugeot E-3008 deslizándose entre pancartas, abrazos, risas y pasos decididos, fue mucho más que una coincidencia estética. Fue una metáfora perfecta: la movilidad del futuro no se mide solo en caballos, kWh o pantallas curvas, sino en su capacidad para alinearse con un propósito colectivo. Porque un coche puede ser mucho más que un medio de transporte. Puede ser un reflejo de lo que creemos, de cómo queremos criar y del tipo de mundo que soñamos para nuestras hijas e hijos.

Y en esta carrera por la igualdad, lo importante no es llegar primero. Es llegar todos y todas, juntos. Con pasos firmes. Y con vehículos que acompañen ese camino con compromiso, innovación y respeto.