La deliciosa merluza en salsa verde es una receta tradicional que nunca falla en las celebraciones y reuniones familiares. Se trata de una preparación de merluza fresca en una rica salsa que realza el sabor de este exquisito pescado.
Este plato es perfecto si buscas una receta deliciosa sin sacrificar mucho tiempo en la cocina y que además es una versión nostálgica y casera que se ha transmitido de generación en generación.
La primera parte del proceso es la elección de la merluza. Puede ser fresca o congelada, ambas opciones son igual de válidas. Si se trata de merluza congelada, asegúrate de que la descongelas de manera adecuada para mantener su textura y sabor.
Limpia las piezas de merluza con agua y sécalas bien. Asegúrate de echar un buen vistazo en busca de espinas y retira si es necesario.
El siguiente paso es calentar cada lado del pescado en un poco de aceite de oliva en una sartén a fuego medio. Debes obtener un pescado caliente y dorado.
La elección de la salsa verde es otra decisión crucial. Puedes usar la receta de tu madre o abuela, que suele ser un secreto familiar lleno de amor e historia, o puedes experimentar con tu propio toque.
Esta salsa, de un color verde brillante y fresco, está elaborada a base de ajo, cebolla, perejil y un poco de caldo de pescado. Para aquellos que prefieren una merluza en salsa verde sin caldo de pescado, también se puede sustituir este ingrediente por agua o por un caldo de verduras ligero.

Puedes añadir gambas para darle un sabor extra si eres amante de los mariscos. Sin embargo, si prefieres un sabor más suave, puedes omitir el caldo de pescado y hacer una merluza en salsa verde sin caldo de pescado, usando agua en su lugar para crear la textura de la salsa.
Recuerda siempre que la clave de una buena salsa es encontrar el equilibrio entre la acidez, el salado y un poco de dulzura.
Añadir almejas a tu plato le dará un toque de mar que sorprenderá tus papilas gustativas, creando una explosión de sabores con cada bocado.
En cuanto a la preparación de la salsa, el proceso requiere atención en cada minuto. Una salsa perfecta se logra con un fuego medio, removiendo constantemente para evitar que se pegue.
Si prefieres una versión más ligera, puedes preparar la merluza en salsa verde sin harina, utilizando un espesante alternativo como el puré de patata.
Por último, al comprobar si tu salsa ha alcanzado el punto ideal, deberá estar caliente pero no hirviendo, para no deteriorar el sabor de tus ingredientes de alta calidad. Como cada salsa, es importante probarla antes de servir, ajustando la sal y otros condimentos según sea necesario.
Finalmente, puedes acompañar la merluza con una guarnición de patatas cocidas y disfrutar de un plato delicioso y saludable.