En el mundo de la alimentación infantil, encontrar opciones saludables y atractivas para los más pequeños puede resultar todo un desafío. Afortunadamente, existe una deliciosa solución que combina sabor, diversión y nutrientes esenciales: el calabacín rebozado. Y esta es la receta perfecta para hacerla, además de que resulta muy sencillo incluso para los padres y madres para los que la cocina no es cosa suya.
Es perfecto por su sabor, su textura divertida, su fácil introducción y por los nutrientes que tiene y que son de lo más saludables para toda la familia. Y es que el calabacín es una buena fuente de vitaminas y minerales esenciales, como la vitamina C, el potasio y la vitamina B6. Al incluirlo en la dieta, se proporcionan nutrientes importantes para el crecimiento y desarrollo de los niños. Así que es perfecto, no puede tener más que cosas buenas.
Además, esto ayuda a aumentar la variedad en la dieta y así garantizar una ingesta equilibrada de nutrientes. Introducir diferentes formas de preparar verduras, como rebozadas, puede ayudar a diversificar la alimentación de los niños. Y si además lo preparamos con ellos y les hacemos partícipes, incluso lo presentamos de una manera curiosa, divertida y simpática será como un juego y mucho mejor para que se animen a probarlo.
Descubre cómo transformar este versátil vegetal en un snack irresistible que hará las delicias de los más pequeños mientras les brinda los beneficios de una alimentación equilibrada. Y no solo para ellos, sino para el resto de la familia para un picnic improvisado o para una cena entre semana donde uno no sabe ni qué preparar para comer al final del día ¡Prepárate para sorprender a tus pequeños con esta fantástica receta de calabacín rebozado!
Ficha
Tiempo de preparación VegetarianDietmin
Tiempo de preparación 15min
Tiempo de cocción 15min
Porciones 4
Tipo de receta 5(n/a)
Ingredientes
●Un calabacín pequeño o mediano en función de los que seáis en casa y cuántos comensales van a degustar este plato.
● Un huevo. Si la cantidad de calabacines es mucho mayor se podría añadir otro huevo.
● 40 gramos de harina
● 10 gramos de aceite de oliva, el oro líquido que además tiene numerosas propiedades saludables.
Elaboración
Paso a paso:
1. Lavar el calabacín a conciencia y sin pelar todavía, lo primero de todo es cortar esta verdura en rodajas de medio centímetro. Mejor si no son más anchas ya que de lo contrario se harán peor y tampoco demasiado finas o se romperán enseguida al darles la vuelta.
2. Ahora es el turno de cubrir la base de una sartén con aceite de oliva y poner a fuego medio para que se vaya calentando poco a poco sin que el aceite se queme.
3. Batir un huevo. Y ahora vamos a rebozar pasando cada rodaja de calabacín por la harina y a continuación por el huevo, y freír por ambos lados. El rebozado de toda la vida, no puede haber nada más sencillo.
4. Cuando estén doradas, colocar en una bandeja cubierta con papel absorbente de cocina y servir. No esperar demasiado para comer ya que frías no tienen sentido alguno y tampoco calentadas de nuevo en el microondas pasado un tiempo. Lo mejor es disfrutar de ellas recién hechas.
