Muchas mujeres embarazadas piensan que el inicio del parto y su desarrollo están relacionados con las fases de la luna.
Así, se suele decir que en días de luna llena nacen más niños, en luna nueva los partos son más fáciles y rápidos, en cuarto creciente los partos son muy bonitos y en cuarto menguante disminuye el número de partos y se producen más incidentes.
Algunos investigadores se han preocupado por averiguar si esta creencia es cierta: han comparado las estadísticas de partos con las fases de la luna, y han visto que ambos hechos no guardan ninguna relación. Pero hay que puntualizar que no todos los estudios se realizaron con una muestra de casos significativa ni estaban bien diseñados.
También hay quien cree que en el inicio del parto influyen los cambios de tiempo. Un estudio de ginecólogos japoneses demuestra que las bajas presiones atmosféricas influyen en el comienzo del parto y la rotura prematura de membranas (bolsa amniótica), pero un único trabajo no puede tomarse como válido, deben hacerse más investigaciones para ver si ese resultado se confirma (así es la ciencia).
Dr. Pedro de la Fuente es catedrático de Ginecología y Obstetricia