Puede que no hayas oído hablar del cerebro de “palomitas de maíz” pero estas señales te indican si tu hijo también lo tiene

El llamado "cerebro de palomitas de maíz" habla de la mala relación que tenemos con la tecnología y la necesidad de cambiarlo cuanto antes.
cerebro de palomitas de maíz
Una exposición excesiva a las pantallas y la tecnología se relaciona con el llamado "cerebro de palomitas de maíz".

Si no habías oído hablar hasta ahora del “cerebro de palomitas de maíz”, seguro que a partir de ahora no solo lo vas a encontrar en un montón de artículos y reseñas, además vas a poder identificarlo muy fácilmente porque está más presente en nuestro entorno del que somos conscientes. Sí, las pantallas y la relación de nuestros hijos con ellas tiene mucho que ver con el llamado “cerebro de palomitas de maíz”, ya que se produce precisamente por eso por el uso en exceso, el abuso de las pantallas que termina por afectar a la capacidad de atención y al desarrollo de millones de niños en todo el mundo, incluidos nuestros propios hijos.

David M. Levy, profesor de la Universidad de Washington en Estados Unidos, fue el creador del término en el año 2011 para describir un estado mental que se caracteriza por una atención dispersa y una tendencia a saltar de un tema a otro que a él le recordó a la forma que tienen los granos de maíz de explotar cuando se convierten en palomitas.

Y sí, es una tendencia que se ha ido haciendo cada vez más frecuente y por tanto, más relevante en una sociedad como la nuestra hiperconectada, especialmente los niños, los jóvenes y los adolescentes que crecen rodeados de dispositivos digitales.
Los investigadores Mathura Shanmugasundaram, de la Universidad de Harvard y Arunkumar Tamilarasu, investigador independiente; han llevado a cabo una revisión sobre el impacto de la tecnología digital, las redes sociales y la inteligencia artificial en las funciones cognitivas, analizando los beneficios que nos han aportado pero también los problemas o complicaciones que nos pueden estar generando.

cerebro de palomitas de maíz
La capacidad de atención y de concentración se van modificando en nuestro cerebro. - Imagen: midjourney / PF

Cómo es un “cerebro de palomitas de maíz”

Es fácil de focalizar ya que la definición se refiere al estado en el que las personas, independientemente de su edad pero más frecuentemente entre los más jóvenes, sufren una disminución significativa en su capacidad de mantener la atención por culpa de la constante estimulación digital a la que están sometidos, en la mayoría de las ocasiones de forma consciente y por supuesto voluntaria.

Así es muy difícil concentrarse en tareas y ocupaciones que precisen de un enfoque sostenido, sobre todo si no son tareas que les proporcionen una satisfacción instantánea, una gratificación como la que sí ofrecen las plataformas digitales o las redes sociales.

Las personas con el "cerebro de palomitas de maíz" suelen mostrar una necesidad constante de estimulación y pueden sentirse aburridos o inquietos cuando se enfrentan a actividades que requieren de paciencia, de espera o incluso de reflexión profunda. 

Este fenómeno no es una enfermedad diagnosticable, sino más bien una descripción de un patrón de comportamiento y cognición que se ha vuelto cada vez más común en la era digital.

El desarrollo del "cerebro de palomitas de maíz" está estrechamente relacionado con el uso excesivo de dispositivos digitales y la exposición constante a estímulos rápidos y cambiantes. Algunos factores que contribuyen a este fenómeno incluyen:

  • Tiempo excesivo frente a pantallas: La exposición prolongada a dispositivos electrónicos puede alterar la capacidad de concentración y hacer que las actividades no digitales parezcan menos atractivas.
  • Gratificación instantánea: Las redes sociales y otras plataformas digitales proporcionan recompensas rápidas en forma de likes, comentarios y notificaciones, lo que puede crear una dependencia de este tipo de estímulos.
  • Multitarea constante: El hábito de cambiar rápidamente entre diferentes aplicaciones o tareas puede sobrecargar los procesos cognitivos del cerebro, llevando a una disminución de la capacidad de atención. Los multicostes de la multitarea, han sido objeto de investigación para poder valorar los efectos que este hábito tiene en el cerebro.
  • Diseño adictivo de las aplicaciones: Muchas plataformas digitales están diseñadas específicamente para mantener a los usuarios enganchados, utilizando técnicas que explotan los mecanismos de recompensa del cerebro.

Cómo afecta y cómo combatirlo

El "cerebro de palomitas de maíz" puede tener consecuencias significativas en el desarrollo cognitivo y emocional de los niños y adolescentes. Algunos de los efectos más preocupantes incluyen:

  • Dificultades de aprendizaje: La capacidad reducida para mantener la atención puede interferir con el proceso de aprendizaje, especialmente en entornos educativos tradicionales.
  • Problemas de socialización: La preferencia por la interacción digital sobre la presencial puede afectar el desarrollo de habilidades sociales cruciales.
  • Alteraciones del sueño: El uso excesivo de dispositivos, especialmente antes de dormir, puede llevar a problemas de sueño que afectan el rendimiento diario.
  • Aumento del estrés y la ansiedad: La necesidad constante de estímulos y la sobrecarga de información pueden contribuir a niveles elevados de estrés y ansiedad.

El "cerebro de palomitas de maíz" representa un desafío significativo en la era digital, pero con conciencia, educación y estrategias adecuadas, podemos ayudar a nuestros hijos a desarrollar hábitos saludables de uso de la tecnología y fomentar habilidades cruciales para su éxito futuro en un mundo cada vez más conectado.

Los padres y educadores desempeñan un papel crucial en la prevención y manejo del "cerebro de palomitas de maíz". Es importante que estén informados sobre los riesgos asociados con el uso excesivo de tecnología y que implementen estrategias para promover un equilibrio saludable entre el mundo digital y el real.

cerebro de palomitas de maíz
Estar expuestos a distintos dispositivos tecnológicos de manera habitual modifica las capacidades del cerebro. - Imagen: Midjourney / PF

Una llamada a la acción

Es cierto que existen formas de mitigar los efectos del "cerebro de palomitas de maíz" y fomentar un uso más saludable de la tecnología y quizás no tanto eliminarla de las aulas como ha planteado recientemente la Comunidad de Madrid generando una importante controversia entre centros educativos y expertos.

Es recomendable establecer límites de tiempo de uso de pantallas, crear unas reglas claras sobre cuándo y por cuánto tiempo se pueden usar dispositivos digitales.

También se recomienda fomentar la realización de forma habitual de actividades donde no intervengan las pantallas ni los dispositivos electrónicos, hobbies y actividades que no involucren tecnología, como la lectura, el deporte, cuidar las plantas de casa o las artes. Se ha comprobado por distintos estudios que a mayor actividad al aire libre, menos ansiedad entre niños, jóvenes y adolescentes.

Es muy positivo en este sentido fomentar la interacción social de forma presencial, animar a nuestros hijos e hijas a participar en actividades grupales tanto deportivas como culturales y de ocio. De una forma sencilla y gradual se puede practicar con los niños técnicas de mindfulness, atención plena y meditación, con la intención de que poco a poco vaya mejorando su capacidad para concentrarse.

Que en casa haya zonas “free tech” o libres de tecnología puede ser de gran ayuda para todos, espacios o áreas en donde no se permita el uso ni la presencia de dispositivos electrónicos. Los padres y educadores son el ejemplo a imitar, el espejo en el que se miran los niños así que lo primero que hay que hacer es limitar el propio uso de los dispositivos digitales y tener un comportamiento saludable en la relación que mantenemos con la tecnología.

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Educar a los niños en un uso sensato de las pantallas evita que padezcan el "cerebro de palomitas de maíz", según los expertos. - Imagen: Midjourney / PF

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