A partir del año el bebé está preparado para aceptar prácticamente todos los alimentos que comemos los adultos. De hecho, es más fácil decir lo que no se debe dar que lo que se puede dar.

Os recomiendo incorporar al niño/a a la mesa familiar si no lo habíais hecho ya y promover conductas saludables de alimentación, rutinas y horarios, así como enseñar al niño o la niña a comer con cubiertos, servilleta y buenos modales a mesa, dando nosotros mismos ejemplo.
Vamos a detallar qué podemos ofrecer por grupos de alimentos:
Cereales
Se pueden dar todos. Arroz, pasta de trigo (macarrones, espaguetis) placas de lasaña o canelones, pan en todas sus versiones, pan integral, bollería casera sin azúcar (bizcocho, galletas caseras) cus- cus, quinoa, sémola de trigo, gofio, copos de avena... Se recomienda apostar por variedades integrales de grano completo y evitar presentaciones de bollería industrial que suelen contener azúcares o grasas no saludables.
Frutas
Se pueden dar todas las frutas desde los seis meses y, lógicamente, a partir de los 12 meses igual. Es recomendable ir introduciendo frutas de temporada conforme pasen los meses.
Verduras
Introducimos aquellas verduras de hoja verde que no se habían introducido antes: lechuga, remolacha, repollo, col, acelga, espinacas…La única excepción es la borraja que se debe evitar hasta los 3 años. Os recomiendo limitar la cantidad máxima de verduras de hoja verde sea de 45 gramos al día. Alcachofas, coles de Bruselas, etc. también pueden ofrecerse.
Legumbres
Se pueden dar todas. Garbanzos, alubias, lentejas, guisantes, soja… en forma de guisos, hummus, tofu o soja texturizada.
Carnes
Se pueden ofrecer todas las carnes: de pollo, pavo, conejo, cordero, ternera, cerdo. Evitaremos carnes de caza sin control sanitario o cazadas con munición de plomo. También debemos evitar vísceras hasta los seis años, ya que contienen una cantidad excesiva de grasa.
Pescados
Se pueden dar todos los pescados, tanto blanco como azul. Algunos de los más consumidos en nuestro país son merluza, pescadilla, lenguado, salmón, pijota, dorada, lubina, salmonete, sardina o boquerón. Evitaremos pescados grandes con gran contenido en mercurio (los mismos que se evitan en el embarazo) que serían atún rojo, tintorera, cazón, pez espada o emperador, tiburón.

Mariscos
Se pueden dar todos los mariscos y moluscos (almejas, mejillones, coquinas, …) a excepción de cangrejo y buey de mar y las cabezas de gambas, langostinos y cigalas, por su excesivo contenido en cadmio. Sí se pueden tomar el cuerpo de estos mariscos. Al tratarse de un alimento alergénico, el marisco debe ofrecerse por primera vez en pocas cantidades y vigilando la aparición de urticaria, inflamación de labios, diarrea o vómitos.
Lácteos y queso
A partir del año la leche pasa a ser un alimento más dentro de una dieta equilibrada. Se recomienda continuar con leche materna y en caso de lactancia artificial evitar las llamadas leches de crecimiento y pasar a leche entera de vaca. La AEP nos recomienda dar leche entera mínimo hasta los 2 años, ya que su grasa resulta beneficiosa para el crecimiento y desarrollo de los niños. A partir de los dos años si el niño o la niña tienen sobrepeso u obesidad ofreceremos leche semidesnatada. En cuanto a derivados lácteos a partir del año pueden ofrecerse yogur (apostar por variedades sin azúcar) yogur griego, mantequilla, nata, queso fresco, queso de untar, ricota, mozarella… conforme el niño vaya desarrollando el gusto y la madurez para comer otro tipo de texturas se podrán ofrecer quesos semicurados y curados, poco a poco.
Bebidas vegetales
Cada vez existe más variedad de bebidas vegetales en el mercado, derivadas de cereales o frutos secos. Es importante recalcar que no sustituyen el aporte de lácteos ya que no aportan las proteínas y vitaminas de la leche. Pueden ofrecerse todas y sus derivados, como yogures, evitando bebida vegetal de arroz y tortitas de arroz hasta los seis años, por su excesivo contenido en arsénico.
Embutidos, conservas y paté
Se recomienda evitar embutidos tipo salchichón, chorizo… por su contenido elevado en sal y posibilidad de atragantamiento. Lo mismo ocurre con el jamón, que resulta demasiado fibroso para empezar a ofrecerlo hasta que el niño o la niña tengan una adecuada capacidad de masticación y experiencia con los alimentos sólidos. No se recomienda ofrecer salchichas por ser carnes procesadas de baja calidad y por riesgo de atragantamiento. Evitar los fiambres que contienen aditivos, féculas y azúcar añadido.
No se recomienda dar paté mínimo hasta los dos años, incluso hasta los seis años en caso de paté de hígado, por alto contenido en grasa y llevar contenido de vísceras. En el caso de las conservas también se recomienda evitarlas por su contenido en sal, hasta los dos años. El atún claro en lata podría ofrecerse a partir del año, aunque es recomendable hacerlo de forma puntual por el contenido en sal de la conserva.

Azúcar, miel, sal y especias
La Organización Mundial de la Salud nos recomienda evitar el azúcar hasta los dos años. Se puede usar canela para aderezar postres o fruta o dátiles triturados en caso de bizcochos o bollería casera. Los edulcorantes no están recomendados.
También se puede dar miel a partir del año, pero sin abusar, por su elevado contenido en azúcares. En cuanto a la sal también se recomienda evitarla hasta los 24 meses. Evitad también conservas, pastillas de caldo, sopas de sobre y precocinados, que suelen ser altas en contenido de sal. Se pueden usar especias para dar sabor como orégano, curry, romero, albahaca, ajo en polvo, perejil, nuez moscada o comino.
Huevo
Se puede dar huevo cocido, en tortilla francesa, española o acompañando a otras preparaciones. Vigilaremos de forma especial si aparece algún tipo de síntoma de alergia al dar una preparación en la que el huevo que no esté totalmente cocinado.
Cantidades recomendadas por grupos de alimentos a partir del año
- Frutas, verduras y cereales: se recomienda tomar a diario 3 porciones de fruta, 2 de verduras (en comida y cena) y dos o tres de cereales al día.
- Legumbres: mínimo 2 veces por semana. Se podrían dar incluso a diario, ya que son alimentos muy beneficiosos por su contenido en fibra y proteínas de origen vegetal.
- Carne: de tres a cuatro veces por semana. La cantidad diaria no debe exceder los 50 gramos.
- Pescado: de tres a cuatro veces por semana. La Asociación Española de Pediatría nos hace especial mención al pescado azul de pequeño tamaño (sardina-boquerón) y nos recomienda mínimo ingesta una vez por semana, por ser muy saludable y con múltiples beneficios para los niños. La cantidad diaria de pescado no debe exceder los 60-70 gramos.
- Huevos: de dos a siete por semana. Máximo una unidad al día.
- Leche y lácteos: se recomiendan como mínimo dos raciones de lácteos por día. Una ración serían 250 ml de leche entera, dos yogures, 100 g de queso fresco ó 50 g de queso curado. Una cantidad excesiva de leche desplaza el consumo de otros alimentos y puede ser causa de estreñimiento. Esta cantidad diaria incluye tanto la leche como el queso, yogur, nata, mantequilla,,,
- Frutos secos triturados: se pueden ofrecer a diario, pero triturados. Es muy importante recordar que no se deben ofrecer frutos secos enteros a los niños hasta los 5 años, por alto riesgo de atragantamiento.
¿Cuáles son los alimentos prohibidos por riesgo de atragantamiento?

Los siguientes alimentos son muy peligrosos por el alto riesgo de obstruir la vía aérea, sobre todo en niños que aún no manejan muy bien los sólidos o acaban de abandonar los purés y potitos:
- Zanahoria y manzana cruda
- Salchichas
- Caramelos y chicles
- Frutos secos enteros
- Aceitunas
- Cerezas y arándanos
- Huesos en la carne y raspas en el pescado
Otros alimentos no recomendados
- Zumos: Evitar los de supermercado siempre. Los naturales también intentar evitar, es mejor ofrecer la fruta entera en trozos adaptados a su edad.
- Café: no recomendable durante toda la infancia por el contenido en cafeína. Nunca antes de los 12 años
- Té: no recomendable durante toda la infancia por el contenido en teína. Nunca antes de los 12 años
- Refrescos: desaconsejados a todas las edades por contenido en azúcar y gas.
- Ultraprocesados (pizzas congeladas o precocinados, salchichas, embutidos, sopas precocinadas, salsas tipo ketchup, cereales azucarados de desayuno, cremas de chocolate tipo Nocilla o Nutella, chucherías, natillas, petit suisse, yogur con azúcar, bollería industrial... no recomendados a ninguna edad.
- Algas: por su alto contenido en yodo no son recomendables en bebés menores de un año. Posteriormente si se quieren ofrecer se debe hacer en pequeñas cantidades y de forma ocasional.
- Cacao: contiene teobromina (estimulante) Sin azúcar y en pequeñas cantidades como ingrediente de una receta puede darse a partir de 6 meses. Más recomendable esperar a los 12 meses
- Edulcorantes como estevia, sucralosa, aspartamo, sacarina, sorbitol.... Evitar en menores de 3 años.