Somos conscientes de la necesidad de inculcar las bases de una alimentación sana a los más pequeños desde la primera infancia. Aunque en el día a día su dieta debe estar protagonizada por los alimentos sanos: fruta, verdura, legumbre, etc. No está de más dejar que alguna que otra vez se den un caprichito.
¿Quién no quiere una deliciosa pizza para cenar? Si a esta receta le sumamos la presencia de alimentos como el brócoli o los champiñones, tendremos una receta muy saludable. Y es que, dentro de los alimentos que están hechos para comer de manera ocasional, hay opciones y opciones: siempre será mejor y más saludable una pizza casera hecha en casa que una precocinada.
El brócoli es una hortaliza que aporta una gran cantidad de vitaminas y minerales como el hierro, el calcio o el potasio. Por otro lado, los champiñones son un alimento que nos ayuda a proteger el sistema inmunitario gracias a los altos valores de proteínas y antioxidantes que contienen.
Así que, demás de para los niños, esta receta también es perfecta para tomar durante el embarazo porque aporta los contenidos nutricionales necesarios para una buena salud.
Si al brócoli y champiñones le añadimos unos trocitos de pollo salpimentado al gusto, tendremos una sabrosísima receta, ¡seguro que te encanta!
Ficha
Tiempo de preparación min
Tiempo de preparación min
Tiempo de cocción min
Porciones
Tipo de receta (n/a)
Ingredientes
- Para la masa:
- 300 gramos de harina de fuerza
- 200ml de agua templada
- 3 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cucharadita de sal
- 10 gramos de levadura fresca
- Para la pizza:
- Salsa de tomate
- 200 gramos de champiñones
- 80 gramos de queso mozzarella
- ·½ brócoli
- 1 pechuga de pollo
Preparación
Comenzamos incorporando la harina, el aceite y la sal en un recipiente. Después, disolvemos la levadura fresca en el agua y lo añadimos al bol. Mezclamos todo bien, de modo que todos los ingredientes queden completamente integrados y dejamos reposar durante 5 minutos.
A continuación, enharinamos ligeramente la encimera sobre la que vamos a trabajar la masa. Colocamos la masa sobre ella y comenzamos con el amasado. Para ello, plegamos con fuerza, una y otra vez, hasta que obtengamos una masa fina y homogénea. Después, le damos forma de bola y la colocamos de nuevo en el recipiente. Tapamos con un paño y dejamos reposar hasta que aumente su volumen.
Mientras que la masa reposa, preparamos el resto de los ingredientes de la pizza. Para empezar, cortamos la mozzarella en láminas y las ponemos a escurrir. Por otro lado, cortamos la pechuga de pollo en trozos medianos y el brócoli y los champiñones en trozos pequeños y salpimentamos.
Pasado el tiempo de reposo, recuperamos la masa y la estiramos hasta darle la forma que queramos. Después, la colocamos sobre la bandeja del horno, que debe estar forrada con papel vegetal. Añadimos la salsa de tomate, sin llegar hasta el borde. A continuación, colocamos la mozzarella y, después, los trozos de brócoli, champiñones y pollo.
Precalentamos el horno a una temperatura de 200ºC. Cuando haya cogido suficiente calor, metemos la pizza en el horno, bajamos la temperatura a 180ºC y dejamos hornear durante unos 15 o 20 minutos. ¡Ya tenemos nuestra pizza lista!
Receta elaborada por los expertos cocineros de Levital