¿Cómo conseguir que tus hijos salgan de la piscina a la primera? El psicologo y experto en crianza, Alberto Soler, ha publicado recientemente en su cuenta de instagram @asolers un “reel” con las mejores estrategias para conseguir una de las cosas que más desean los padres y las madres en verano que no es otra que lograr que los niños salgan del agua a la primera.
“Este es un “reel” que nos habéis pedido muchísimo”, dice Soler, “por eso, hoy vamos a revisar algunas de las mejores estrategias basadas en la evidencia para conseguir que nuestros hijos salgan de la piscina al primer aviso que no os den la tarde”.
Recomendaciones en clave de humor para que los niños salgan de la piscina a la primera según el psicólogo Alberto Soler
A continuación, el psicólogo Alberto Soler señala, en clave de humor, las siguientes recomendaciones:
1.Quitar el tapón de la piscina. Una vez esté vacía pues ya no habrá más diversión y tendrán que salir por la fuerza.
2.Lanzar pirañas. Así cuando el primer niño note el bocado de la piraña pues todos los demás saldrán corriendo detrás de él.
3.¡Grita “tiburón”! Después, echa unas gotas de tinte rojo a la piscina y verás como sale en cero coma.
4.Echa un cubo de hielo al agua. Al cabo de pocos minutos, todos fuera.
5.Coge un megáfono anuncia que se anuncia un tornado y que la piscina se tiene que desalojar de manera inmediata.
6.Te vas al supermercado comprar una sepia fresca y te la metes dentro del bañador. Con sigilo te metes en la piscina y, de repente, la sacas y gritas: “¡Medusa!” verás como no tardan en salir.
La mejor estrategia para que los niños salgan de la piscina a la primera
Después de estas irónicas estrategias el psicólogo Alberto Soler pregunta a sus seguidores: "¿qué otras estrategias estabais esperando? ¿Es que vosotros no habéis tenido infancia o qué? ¿Acaso vosotros salíais de la piscina a la primera cuando os lo decían vuestros padres u os hacíais los remolones?"
Tras esta reflexión Soler indica que quizá la mejor estrategia, para lograr que nuestros hijos salgan de la piscina sin que nos enfademos y esta es “que nos armemos de paciencia, que lo entendamos como una parte normal de la infancia, que no es un pulso contra nosotros y un desafío a nuestra autoridad y sobre todo que recordemos que nunca en la historia de la humanidad, ningún niño se ha pasado todo el invierno hasta el siguiente verano dentro de la piscina porque se negó a salir. Todos al final, acaban saliendo, os lo aseguro”.
