Cada vez está más cerca la noche más terrorífica del año: Halloween. Una fecha señalada en el calendario de muchos niños, que aprovechan la ocasión para disfrazarse de sus personajes de miedo favoritos, para jugar a diferentes actividades y, sobre todo, para divertirse sin parar.

Aunque Halloween (o la Noche de los Muertos) no sea una fiesta nacida en España, es cierto que son cada vez más las familias que deciden celebrarla en su casa o fuera de ella con una fiesta de lo más terrorífica y divertida. Una fiesta en la que, por supuesto, no pueden faltar los adornos, las recetas tenebrosas, los disfraces y, sobre todo, las actividades terroríficas y los juegos de miedo que usemos como hilo conductor.
Porque no hay nada que haga más feliz a un niño que un ratito de juego y diversión con su familia y también con sus amigos.
Tanto si sois los anfitriones, como si sois los profesores que queréis ambientar el aula para preparar la noche más tenebrosas, como si vais a contratar a algunos animadores, las actividades de miedo que os vamos a proponer a continuación encantarán a todos los niños.
¿Por qué es necesario entrenar el miedo?
En el proceso de maduración emocional, los niños pasarán por muchos estados (entre ellos, las temidas rabietas). Sin embargo, hay una emoción, entre otras, que les acompañará: el miedo. Y es que, es una emoción primaria necesaria, aunque siempre se ha tendido a calificar como negativa.
El miedo es el que nos avisa de los peligros y el que nos pone en alerta cuando nuestro cuerpo siente que necesita protegerse. Por eso, es necesario validar mucho esta emoción desde la infancia y hacer entender a los más pequeños que es una emoción igual de válida que cualquier otra (aunque en su justa medida, como todas).
La noche de Halloween puede ser la ocasión perfecta para recordárselo. ¿Cómo? Pues jugando a alguno de estos juegos de miedo tan, pero tan divertidos para los peques.
Truco o trato
Es el juego identificador de Halloween. De hecho, es una costumbre muy arraigada en países como Estados Unidos y que poco a poco adoptamos a mayor escala aquí en España.
Consiste en que un grupo de niños, ataviados con sus mejores disfracen, toquen los timbres de las casas vecinas con una calabaza a modo de bolso y formulen, al abrir, el mitico “truco o trato”. Si el que está al otro lado de la puerta les da unos dulces, habrá trato, pero si se niega, entonces tendrán que pensar en algún truco para que no se escape (puede ser darle un susto, por ejemplo).

Juego de Halloween “La bruja te protegerá”
Si vais a hacer una fiesta de varios niños, este juego es genial. Los niños se sentarán en círculo y uno se sentará en el medio con los ojos cerrados. A este le entregarás un objeto de miedo (or ejemplo, una araña) y este se lo tendrá que pasar a alguno de los niños del círculo. Eso sí, sin destaparse los ojos. Lo hará diciendo “la bruja te protegerá” y el niño que lo reciba tendrá que decir con la voz un poco disfrazada “las brujas no son mis amigas”. El del medio tendrá que adivinar quién es tan solo escuchando su voz.
“Fantasma, fantasma”
En este juego los niños también están sentados en círculo. Uno camina en las espaldas de los demás dándoles palmaditas y diciendo “fantasma, fantasma” hasta que se pare en uno que él considere y diga “¡vampiro!”. El niño elegido tendrá que levantarse y alcanzarlo antes de que este ocupe su lugar en el círculo. Si no lo consigue, él se convertirá ahora en vampiro.
Jugar a juegos de mesa como el Cluedo

Cluedo Scape (Hasbro) es un nuevo juego que te hará vivir la experiencia Cluedo como nunca antes la has vivido. El objetivo de esta nueva versión es descubrir el asesinato en equipo y escapar de la mansión antes de que llegue la policía.
Los jugadores mueven a sus peones por el tablero que se va creando habitación por habitación a medida que exploran la mansión, cogen cartas, resuelven puzles, abren nuevas habitaciones y usan su deducción para descubrir pistas. Tras escapar de la mansión, los jugadores revisan las pistas con la acusación correcta para ganar el juego.
El juego de la silla para Halloween
¿Te suena el mítico juego de la silla? Pues existe la versión Halloween: decora las sillas para que parezcan tumbas y ambienta con música de miedo. Cada vez que la música se pare los niños tendrán que meterse en una “tumba” y el que se quede fuera será eliminado.
El juego de la momia
Divide a los niños en grupos de tres y da a cada uno un rollo de papel higiénico. Un componente del grupo será la momia, a la que los otros dos tendrán que envolver tan rápido como puedan porque ganará el equipo que termine primero sin dejar rastro por el suelo.

Juego para Halloween: las tinieblas
Este es otro mítico juego de miedo al que todos hemos jugado en algún momento de nuestra infancia. Todos los niños están dentro de la misma habitación, completamente oscura (no puede haber ni un rayito de luz). Todos menos uno se esconderán. El que quede tendrá que buscarlos por toda la habitación pero, claro, al descubrir a alguien tendrá que adivinar tocando su cara o su ropa de quién se trata porque no podrá verlos.
El escondite inglés versión Halloween
Uno contará hasta diez de cara a la pared, al darse la vuelta, todos los demás jugadores deberán estar unos pasos más cerca de él completamente quietos. Eso sí, con posturas que imiten al disfraz que llevan puesto.
Ganará el que primero toque la pared.
Leer a oscuras cuentos de miedo
No hay nada más tenebroso que este juego. Tendréis que tener especialmente cuidado con los niños que tengan menos tolerancia a esta emoción, porque pueden pasarlo mal.
Todos estarán sentados en círculo completamente a oscuras. Tan solo verán la luz tenue de una linterna. Leerán un cuento de miedo mientras, el que lee en voz alta, escenifica un poco las frases y se alumbra su cara con la linterna desde la barbilla. El efecto es completamente aterrador.

Concurso de risas terroríficas
A oscuras, todos los peques emitirán su risa más tenebrosa y ganará la que mejor conseguida esté.
Pasaje del terror
Solo apto para familias o profes manitas es este juego: os proponemos crear un auténtico pasaje del terror para niños con elementos que tengáis por casa o por el cole.