La alimentación del bebé es crucial para su desarrollo, y una pregunta común es: ¿Puedo darle comidas con sal al bebé? En este artículo, abordamos este tema crítico en la nutrición infantil.
Es importante conocer los detalles de la alimentación de los bebés, para que tengan un crecimiento y desarrollo saludable. En esta etapa crucial, es esencial brindarles alimentos ricos en nutrientes esenciales, como hierro y zinc, sin añadir sal, azúcar o edulcorantes.
Lo mejor es que tu hijo coma alimentos sanos y nutritivos. Según la AEPED: No hay alimentos mejores que otros para empezar, aunque se recomienda ofrecer de manera prioritaria alimentos ricos en hierro y zinc y la alimentación debe ser sana y variada. Debemos introducir los alimentos de uno en uno, para observar la tolerancia y la aceptación y no añadirles sal, azúcar ni edulcorantes, para que el bebé se acostumbre a los sabores naturales de los alimentos. Pueden ofrecerse: Cereales, frutas, hortalizas, legumbres, huevo, carne, pollo, pescado, aceite de oliva y evitando durante el primer año verduras de hoja verde con alto contenido en nitratos, como la acelga, la espinaca o la borraja.
Recomendaciones concretas consumo sal
Los lactantes necesitan muy pequeña cantidad, pues sus riñones son demasiados inmaduros para manejar las sobrecargas de sal. Por este motivo no debe añadirse sal a la comida de los bebés, aunque pueda parecernos insípida.
La leche materna tiene la cantidad necesaria y lo mismo ocurre con las fórmulas infantiles. Debemos cocinar para los niños menores de 1-3 años sin sal y los adultos pueden sazonar sus platos a parte.