La incidencia de aborto espontáneo es de 10 a 20% de todos los embarazos clínicos, es decir aquellos casos en los que se evidenció un saco gestacional intrauterino, siendo esta tasa tres veces mayor en embarazos tempranos no reconocidos. Muchas mujeres no identifican embarazo, por ejemplo por periodos irregulares, quedándose embarazadas sin ser conscientes de ello, y al producirse el aborto lo identifican como una menstruación.
El 80% de todos los abortos espontáneos ocurren en el primer trimestre de embarazo.
¿Podrá repetirse?
El factor de riesgo más comúnmente identificado en estas pacientes son la edad materna avanzada y el antecedente de un aborto espontáneo precoz (aborto clínico evidenciado por ecografía).
La frecuencia de abortos espontáneos clínicos para mujeres entre 20 y 30 años es de un 9 a un 17%, aumentando a un 20% a los 35 años, y luego aumenta a un 40% a los 40 años y a un 80% a los 45 años.
En mujeres sin hijos previamente, tras un primer aborto la probabilidad de un segundo aborto es de un 19%, si ha tenido dos abortos previos esta cifra aumenta a 35% y si han tenido tres abortos esta probabilidad asciende a 47%.
Causas de los abortos precoces
El aborto espontáneo precoz es una complicación frecuente del embarazo, siendo su causa más frecuente la presencia de anomalías cromosómicas con progenitores sin alteraciones en el cariotipo, siendo el principal factor de riesgo la edad materna avanzada y el antecedente de un aborto espontáneo previo.
Esto significa que la gran mayoría de los abortos espontáneos precoces ocurren en pacientes sanas, sin factores de riesgo.
¿Cuánto esperar para un nuevo embarazo?
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que esperen seis meses antes de concebir otra vez, basándose más en el aspecto mental, considerando que éste es el tiempo mínimo necesario que requieren las mujeres para recuperarse del trauma que les genera el perder un embarazo.
Sin embargo, una investigación de British Medical Journal con más de 30.000 mujeres contradice este consejo y concluye que cuanto antes vuelvan a gestar, menos posibilidades tienen de sufrir otro aborto o de experimentar complicaciones. Este estudio se centra en aspectos diferentes a los que señala la OMS, pues tiene en cuenta los aspectos fisiológicos y de fertilidad
En este estudio concluían que aquellas mujeres que esperaron menos de seis meses para quedarse otra vez embarazadas tenían menos posibilidades de sufrir otro aborto, de padecer un embarazo ectópico, de tener un parto prematuro, de dar a luz mediante cesárea y de tener un niño con bajo peso.
La recomendación general de los especialistas es esperar mínimo de tres meses o la presencia de dos menstruaciones para que el organismo y el estado anímico de la mujer se hayan normalizado.
