Más de 30.000 personas han reaccionado al post sobre ayudar a nuestros hijos a levantar el ánimo cuando se frustren que Milena González, una conocida psicoterapeuta y escritora que cuenta con más de 750.000 seguidores en Instagram ha publicado hace unos días en su cuenta.
Un consejo sencillo y eficaz que ha sido muy bien acogido por la comunidad de padres y madres que siguen a esta profesional.
Algunos ya lo ponían en práctica, a otros les ha recordado a un personaje de una conocida película de animación y otros muchos han aplaudido la idea asegurando que les viene perfecto para el momento en el que se encuentran sus propios hijos o hijas.
Un mecanismo tan sencillo como eficaz
Todos tenemos miedos, todos tenemos inseguridades y todos necesitamos gestionarlas de un modo que nos haga crecer y no nos anule. A nuestras hijas e hijos les pasa lo mismo y el consejo que plantea esta conocida terapeuta es sencillo y eficaz.
Cuando veas que tu hijo o hija está pesimista ante algún reto, cree que no va a poder afrontarlo, considera que no va a ser capaz de superarlo, háblale de que todos incluso los adultos, tenemos en nuestro interior una especie de voz crítica que nos dice frases como “no eres capaz”, “tu no puedes hacer eso”, “es mejor que ni lo intentes porque no te va a salir”.
¿Qué podemos hacer? Vamos a empezar por dibujar cómo nos imaginamos esa voz interior, Milena González, recomienda que la pintemos con nuestro hijo, ellos la suya y nosotras la nuestra. Y que le pongamos un nombre a cada una de ellas.
Es una forma de compartir y de empatizar, es una forma de enseñar con nuestro propio ejemplo.
Explícale que esa voz no es mala, no pretende hacerle daño, al contrario lo que busca es protegerle y ayudarlo, lo que pasa es que esa no es la mejor forma de hacerlo aunque esa voz no lo sepa.
Enséñale a responder a esa voz interior de una forma tranquila y amable, enséñale a explicarle a esa voz que no le va a hacer caso para que así deje de decirle cosas que le hacen sentir mal.
Cuando pasen los días o las horas y notes que tu hija está en un momento de frustración, coméntale que tu también estás viendo que la voz le está hablando de nuevo. “Parece que estoy escuchando a (menciona el nombre que le puso a su voz cuando la dibujó contigo) que está diciéndote cosas feas otra vez.” y menciónale lo que habiais hablado sobre cómo podía responder a esa voz.
Milena González señala que esta es una forma eficaz de que tu hija o hijo aprenda a conocer su interior, a escuchar sus propios pensamientos en lugar de silenciarlos y a darse cuenta de que sus pensamientos no le definen y que no debe creerlos siempre.