El juego es un instrumento increíble para relacionarte con tu bebé y para fomentar su desarrollo, aparte de que obviamente es perfecto para pasar un buen tiempo en familia. Aunque sabemos que cada pequeño tiene un ritmo de desarrollo diferente, en general suelen gustarles las mismas actividades mientras estas se adapten a su edad. Veamos algunos juegos para niños de diez meses.
En muchas ocasiones, la primera vez que intentes jugar a un juego, puede que este no funcione con tu pequeño. Recuerda que la repetición puede ser clave en este aspecto y que si te esfuerzas quizá en cualquier momento consigas unas cuantas carcajadas de diversión.
Por otro lado, piensa que el tiempo que el bebé prestará atención va a depender mucho de su propia capacidad de atención, de su edad, de su carácter y de su estado de ánimo en ese momento. Habrá veces que te haga caso 20 minutos seguidos y otras en las que tengas que cambiar el juego cada cinco.
Piensa en que algunos pequeños pueden agobiarse más fácilmente, por lo que, si empieza a llorar, tranquilo, consuélale y cambia a otro tipo de actividad más calmada, como leerle un cuento o cantarle una canción mientras le coges en brazos.
Sabrás que tu niño disfruta cuando te mire a los ojos y te sonría o incluso cuando se empiece a reír. Si ves que en vez de eso mira hacia otro lado o se pone a llorar, como decimos, mejor que cambies de juego o que lo dejes descansar.
Juegos para niños de diez meses

Prueba con tu hijo estas actividades sencillas en casa, pero que le ayudarán mucho en su desarrollo:
¡A apilar objetos!
A un bebé de esta edad le gusta entender las conexiones que hay entre los objetos. Por eso uno de sus juegos favoritos será ordenar, apilar, llenar y vaciar cosas. ¿Cómo podemos hacer que se divierta?
Dale una caja que no sea difícil de abril (como una caja de zapatos) y enséñale a meter y sacar cosas de ella. Otra forma de jugar, aunque siguiendo la misma dinámica, es darle un conjunto de tazas que sean apilables y mostrarle al peque cómo llenarlas de agua o harina, por ejemplo. ¡Le encantará pasar el contenido de unas a otras!
Imitando a mamá o papá
Una idea es que hagas un sonido y animes a tu hijo a que te imite. Puede ser que intente hacer lo mismo o que haga su propio “ruido”, el que tú sí puedes imitar. Seguramente consigas que el peque acabe en carcajadas.
La hora del baño también es divertida
Aunque la hora del baño debe significar una rutina de higiene, tu peque también puede divertirse. Y seguramente lo haga, porque a estas edades les encanta tocar su pelo, salpicar, mover la cortina… Lo que puedes hacer es acompañarlo y jugar un rato con él en la bañera, para ello puedes llevarle un montón de cosas de casa para que observe cómo unas flotan y otras no, para que las sumerja en el agua, para que las llene y las vacíe, etc… Recuerda no dejarlo solo en el baño ni en un segundo.
¡A por su juguete preferido!
Normalmente, en torno a los diez meses, los bebés son capaces de ponerse de pie. Si quieres estimular su desplazamiento puedes coger su juguete favorito y colocarlo lejos de su alcance, como en la otra punta del sofá o de la mesa. Trata de que el pequeño se desplace y vaya a por él.