La maternidad, un proceso que debería ser motivo de celebración, sigue siendo una amenaza mortal para miles de mujeres en todo el mundo. Un reciente estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha revelado una estadística alarmante: cada dos minutos, una mujer pierde la vida debido a complicaciones durante el embarazo o el parto. Esta cifra, que se traduce en aproximadamente 287.000 muertes de mujeres relacionadas con la maternidad cada año, pone de manifiesto una crisis de salud a nivel global.
La mayoría de las muertes de estas mujeres ocurren durante el parto o poco después, lo que convierte este período en una "ventana crítica" para salvar vidas. Sin embargo, alrededor de un tercio de las mujeres, especialmente en países de bajos ingresos, no tienen acceso a chequeos postnatales en los primeros días después del alumbramiento.
Mortalidad y maternidad
Las razones detrás de estas muertes son diversas, pero lo más triste de todo es que en su mayoría son prevenibles. Según el informe de la OMS, publicado en la revista Lancet Global Health, las hemorragias son la causa principal, responsables del 27% de las muertes maternas (alrededor de 80.000 al año). Los trastornos hipertensivos, como la preeclampsia, ocupan el segundo lugar, provocando el 16% de las muertes (unas 50.000 anualmente).
Casi una cuarta parte de las muertes están relacionadas con condiciones preexistentes que complican en algún momento el desarrollo del embarazo o bien suponen un problema durante el parto. Enfermedades como el VIH, la malaria, las anemias y la diabetes a menudo no son diagnosticadas o tratadas hasta que surgen complicaciones graves y este hallazgo subraya la importancia de un cuidado prenatal integral que pueda detectar y manejar estas condiciones de manera temprana.
El estudio también identifica otras causas directas de mortalidad materna, como la sepsis y las infecciones, la embolia pulmonar, las complicaciones que se presentan cuando hay abortos espontáneos o incluso abortos inducidos, las reacciones adversas a anestesias y las lesiones que se producen accidentalmente durante el parto.

Desigualdad y mortalidad
La crisis de mortalidad materna, la mortalidad de las mujeres durante el embarazo o el parto, no afecta a todas las regiones del mundo por igual. Mientras que en los países de la OCDE el promedio de este tipo de muertes es de 10.9 por cada 100.000 nacidos vivos, en países de bajos ingresos esta cifra puede ser significativamente mayor. Por ejemplo, Indonesia registra 173 muertes por cada 100.000 nacimientos, lo que ilustra la profunda brecha en la atención de salud materna entre diferentes partes del mundo.
La reducción de la mortalidad materna es un objetivo crucial dentro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, que busca disminuir la tasa global a menos de 70 muertes por cada 100.000 nacidos vivos para 2030.
La OMS y otros expertos en salud global enfatizan la necesidad de implementar estrategias integrales para abordar esta crisis:
- Fortalecimiento de servicios prenatales: De cara a mejorar la detección temprana de riesgos y poder prevenir posibles complicaciones severas que pudieran surgir.
- Mejora de la atención obstétrica: Para desarrollar la capacidad de manejar emergencias críticas durante el parto, como hemorragias o embolias que pueden devenir en el fallecimiento de las mujeres.
- Expansión de la atención postnatal: Con la intención de asegurar que todas las mujeres reciban cuidados de salud básicos y esenciales en los días posteriores al parto.
- Abordar condiciones subyacentes: Que puedan llegar a implementar intervenciones preventivas a nivel poblacional para reducir todo lo posible, la prevalencia de enfermedades no transmisibles y la malnutrición que hacen que aumenten los riesgos para las mujeres durante el embarazo.
- Equidad en el acceso a la atención: Y así poder garantizar realmente que todas las mujeres, independientemente de su ubicación o estatus socioeconómico, tengan acceso a atención de calidad antes, durante y después del parto, como un derecho humano más que hay que proteger y asegurar.

Tecnología, investigación y desarrollo
La detección y el tratamiento adecuado de las complicaciones durante el embarazo ha experimentado avances significativos en los últimos años, gracias a la implementación de nuevas tecnologías y enfoques médicos, el problema es que no todos los países tienen acceso a estos avances, lo que deja en situaciones muy precarias a millones de mujeres en todo el mundo.
Las pruebas de sangre avanzadas son un nuevo test rápido desarrollado por investigadores de la Universidad de Queensland que permite detectar complicaciones como la diabetes gestacional y la preeclampsia a partir de las 11 semanas de embarazo, lo que supone una mejora sustancial frente a los métodos tradicionales, que suelen diagnosticar estos problemas en el segundo o tercer trimestre. investigaciones recientes han venido a subrayar la importancia de evaluar la salud de la placenta con la intención de predecir y tratar posibles complicaciones, sobre todo relacionadas con problemas cardiovasculares e incluso trastornos del neurodesarrollo.
Las imágenes de ultrasonido mejoradas como el Doppler y sus distintas variaciones permiten obtener imágenes más detalladas del flujo sanguíneo fetal y placentario, lo que ayuda a detectar anomalías en la circulación antes de que se produzcan complicaciones.
A través de la inteligencia artificial y el análisis de datos, se están consiguiendo la identificaciones de patrones y factores de riesgo que podrían pasar desapercibidos para los médicos y los métodos tradicionales, dado el enorme volumen de datos con los que pueden trabajar los nuevos algoritmos de aprendizaje.
Además, la monitorización remota y la telemedicina permite hacer un seguimiento mucho más continuo y accesible para la mujer embarazada, sobre todo cuando hablamos de embarazos de riesgo en los que la detección temprana de determinados síntomas puede evitar complicaciones que pongan en peligro la vida de la madre o del futuro bebé.
Referencias
- Jenny A Cresswell, Monica Alexander, Michael Y C Chong,Heather M Link, Marija Pejchinovska, Ursula Gazeley. Global and regional causes of maternal deaths 2009–20: a WHO systematic analysis. https://www.thelancet.com/journals/langlo/article/PIIS2214-109X(24)00560-6/fulltext
