Un postre ideal para que los niños coman frutas, especialmente a aquellos pequeños que más le cuestan. Su sabor dulce y su atractiva presentación hará que caigan rendidos a este postre. Un plus será prepararlo juntos; hacer que el niño se sienta en la parte del proceso hará que muestre mayor interés y accedan a comerlo. Veamos cómo prepararlo.
Ingredientes (para 4 personas)
• 125 g de mantequilla derretida y una nuez para engrasar el molde
• 185 g de harina de repostería
• Harina para espolvorear el molde
• 1 kg de melocotones
• 2 cucharadas de zumo de limón
• 2 cucharaditas de levadura en polvo
• 1/2 cucharadita de sal
• 125 g de azúcar
• 2 huevos grandes
• 2 cucharadas de leche
• La ralladura de 1 limón
Para la cobertura:
• 100 g de azúcar moreno
• 1/2 cucharadita de canela molida
• 1/2 cucharadita de jengibre molido
Ingredientes
1. Engrasar un molde desmontable de 23 cm de diámetro con mantequilla y espolvorear harina.
2. Calentar agua y llevarla a ebullición; retirar del fuego y escaldar los melocotones durante 4 o 5 minutos. Escurrirlos y pelarlos cuando estén tibios. Partirlos por la mitad, retirarles el hueso, cortarlos en láminas, disponerlos en un bol y rociarlos con zumo de limón para evitar que se oxiden.
3. Tamizar la harina con la levadura, la sal y el azúcar sobre un cuenco.
4. En otro bol, batir los huevos con la leche y la mantequilla y agregar la ralladura de limón.
5. Mezclar con movimientos envolventes (sin batir) la preparación de los huevos con la harina.
6. Verter en un molde y disponer por encima, y en forma de espiral, las láminas de melocotón escurridas. Rociar toda la superficie de la tarta con el jugo que hayan soltado los melocotones.
7. Para hacer la cobertura, mezclar el azúcar moreno con la canela y el jengibre molido y espolvorear la tarta. Hornear durante 35 minutos a 190 ºC. Dejar que se temple antes de desmoldarla. Servirla templada acompañada de helado de vainilla o decorada con nata montada.
