Sopa de tomate fresco

Preparación

1. Hervir agua para disolver en ella las pastillas de caldo. La cantidad dependerá del fabricante, pero para 1 litro de agua se suele poner dos. Si no vamos a utilizar pastillas, sino un caldo de pollo o de verduras previamente preparado, lo calentamos bien.
2. Pelar los tomates y los pasamos por una licuadora para obtener zumo. Los tomates deben ser lo más maduros posible.
3. Una vez preparado el zumo, lo añadir al caldo y calentamos bien. No hace falta que hierva.
4. Antes de salpimentar, probar, porque quizás el caldo no necesite sal, sobre todo si hemos utilizado pastillas.
5. Si necesita sal, la añadir junto con el eneldo.
Guarnición:
1. Batir los huevos y los freír en una sartén con unas gotas de aceite. Es importante poner solo unas gotas.
2. Cuando estén bien cuajados, añadir nuez moscada y sal a gusto.
Servir:
1. En cada plato poner unas dos cucharadas de revuelto de huevo.
2. Cubrir con caldo de tomate.
3. Espolvoreamos con eneldo. Lo mejor es que sea fresco.