Al igual que es importante elegir un colchón de garantías para uno mismo, lo es también hacerlo para los peques. Los factores a tener en cuenta cambian en el proceso de decisión, pero eso no quiere decir que no se deba escoger a conciencia.
No vamos a dar un veredicto sobre cuáles son mejores y cuáles peores porque no es esta la única forma de elegir en un colchón para la cuna u otro. Son muchos los detalles que entran en juego en esta compra y, como tal, lo que podemos y debemos hacer es enumerarlos y analizarlos para que no se te escapa ninguno cuando te toque afrontar la inversión.
Material
A grandes rasgos, dentro de los colchones de cuna se puede diferenciar entre los de muelles, los de espuma poliuretano y los de látex. Estos últimos, si el látex es natural, son los que mayor capacidad de ventilación ofrecen, y los de viscoelástica son los más ergonómicos. Los de muelles suelen ser muy firmes y esto es algo que no interesa para un recién nacido que apenas pesa ya que puede afectar al desarrollo de su columna vertebral. Por su parte, los de espuma poliuretano destacan por ser la opción más económica.
Sea cual sea el material por el que te decantes para el colchón de cuna, es aconsejable que sea hipoalergénico.
Firmeza y transpiración
Ua te hemos avanzado al respecto alguna pista en el punto anterior, pero no está de más insistir porque ambos factores importan. El colchón de cuna ha de ser firme pero con un límite, de ahí que los de muelles puedan resultar excesivos; y es recomendable que permitan controlar bien la temperatura corporal del niño, es decir, que sean transpirables. Así evitarás el sudor excesivo en verano y el frío en invierno respectivamente.
Medidas
En este caso concreto no hay mucho que hablar, ya que es la medida exacta de la cuna la que dice cómo debe ser el colchón. Por seguridad, no lo escojas más pequeño del espacio de la cuna.
Sistema antiahogo
Esto más que un detalle a tener en cuenta es un apunte porque la mayoría de los colchones de cuna lo llevan. Básicamente, quiere decir que incorporan esta cuestión en su diseño o fabricación de algún modo concreto. En este caso, por ejemplo, tiene una parte de la superficie porosa.
Grosor
Este es uno de los aspectos que más dudas genera en los padres porque al pesar poco el bebé parece que no es necesario comprar un colchón muy grueso. Efectivamente, basta con que mida entre 12 y 18 cms para que sea un colchón de cuna recomendable para un recién nacido.
Que sea desenfundable
A lo mejor no es el primer factor de la lista para decidir qué colchón de cuna comprar, pero tiene su importancia porque es altamente probable que te toque lavarla de vez en cuando, y si se quita con facilidad lo agradecerás. Y mucho.