5 cuentos cortos con moraleja perfectos para niños
Son innumerables los beneficios de las historias contadas y leídas en los más pequeños, y más si cabe historias como estas que aportan un aprendizaje al final de las mismas.
Los cuentos para niños son una fuente de la que brotan a borbotones los beneficios, casi como bajan los ríos después del deshielo o durante la época de lluvias. La imaginación, la creatividad, el desarrollo del lenguaje, y la adquisición de referentes que les ayuden a poner nombre a sus emociones y sentido a sus experiencias son tan solo cuatro ejemplos. La diversión, que también es importante, es un quinto.
La lista podría ser muy larga, tanto que no daría para un artículo corto, pero basta con citar esas cinco para que tenga todo el sentido del mundo intentar inculcarles el amor por los cuentos, narrados o escritos, desde que son muy pequeños. No vamos a decir desde el nacimiento, aunque perfectamente puedes contarles cuentos cortos mientras descansan en tus brazos, pero sí por lo menos desde que tienen unos meses de vida. Cuanto antes, mejor.
Poco a poco, adquirirán el hábito a través de la motivación y la curiosidad que sienten desde pequeñitos, y ese gusto natural por las historias contadas y escritas les acompañará el resto de sus vidas. Sin duda alguna, es uno de los mejores regalos que les podemos hacer a nuestros hijos como padres.
Y como las cosas se demuestran andando, te traemos en este texto una pequeña selección de cuentos cortos con moraleja que son perfectos para iniciar a los peques en el maravillo mundo de la ficción narrada. No hace falta complicarse mucho la vida, hay cuentos clásicos de sobra para ello.
Algunos te gustarán más, otros menos, y también le pasará al peque cuando se los cuentes, pero todos ellos dejan una enseñanza al final de una historia que captará su atención desde la primera palabra. Y es que más importante incluso que la lección en cuestión es que el cuento sea capaz de retener la atención del niño, porque de lo contrario es imposible que acabe escuchando hasta el final y no habrá moraleja que valga.

La liebre y la tortuga
La liebre y la tortuga

pato
El patito feo

ratón
Ratón de campo y ratón de ciudad

pulgarcito
Pulgarcito

La gallina Marcelina