La actividad en los patios de los colegios de Cataluña está blindada. El Parlament ha aprobado por unanimidad la tramitación por lectura única de una proposición para modificar la Ley de protección contra la contaminación acústica, excluyendo de ella el ruido generado en los patios de los colegios en horario lectivo y de extraescolares.
Todos los partidos políticos con representación en el Parlamento de Cataluña — PSC, Junts, ERC, PP, Vox, Comuns, CUP y Aliança Catalana (AC)— han acordado garantizar la protección de la actividad en los patios de los colegios de la región.
Lo han hecho aprobado la tramitación de una modificación de la ley que regula en Cataluña la contaminación acústica. El objetivo es excluir de la misma el ruido generado por la actividad en los patios de los colegios entre las 7:00 horas de la mañana —cuando empiezan los servicios de acogida matinales en los centros educativos— y las 21:00 horas, horario en el que ya han terminado —suelen hacerlo antes— las actividades extraescolares en los colegios durante los días lectivos.
La modificación de la ley se aprobará pronto porque este viernes 28 de febrero concluye el plazo para presentar enmiendas a sus artículos o a la totalidad.
Eso sí, la iniciativa blinda la actividad, pero no toca en ningún el caso el tipo de actividad que se desarrolla en los patios, cuestión sobre la que se han manifestado expertos como Alberto Soler: “son sexistas y discriminan”, dice el psicólogo, que demanda patios inclusivos. Y tampoco aborda otra cuestión de actualidad en referencia a los patios escolares: naturalizar los patios de los colegios, que es una una forma de inclusión y de fomentar el aprendizaje creativo, según un estudio.

El ruido de los patios no son contaminación acústica
El ruido de los patios de los colegios catalanes no será considerado nunca más contaminación acústica. Ninguno de los ruidos relacionados con la infancia y este espacio de juego. El texto de la modificación de la ley autonómica que regula esta cuestión lo deja claro: “el conjunto de ruidos que emanan de los espacios destinados a la actividad docente, física, de patio o recreo de los centros escolares durante las 7.00 horas y las 21.00 horas”.
La medida de los partidos que la han impulsado –Junts, ERC, PP, Comuns y CUP—, se sustenta en que el ruido en los patios de los colegios son “emisiones acústicas propias del normal desarrollo de la vida en estos espacios”. Además, también defienden que blindar la actividad en los patios es una forma de proteger el derecho al juego, uno de los derechos de la infancia que recoge la ONU, como bien se encarga de poner en valor el colectivo infantil y juvenil cuando tiene la ocasión, al igual que hace con otros derechos.
Sin ir más lejos, esta semana, el consejo de infancia y adolescencia de UNICEF pidió a la ministra Sira Rego más psicólogos y figuras de confianza en los colegios para prevenir la violencia infantil.

La medida responde a una polémica ciudadana
La medida para proteger la actividad en los patios de los colegios excluyendo el ruido generado en estos espacios de la ley de contaminación acústica viene por un conflicto ciudadano.
Medios regionales informan que se han llegado a presentar varias denuncias ciudadanas por contaminación acústica de estos espacios educativos infantiles, y también hay colectivos vecinales que denuncian la cesión de los patios para actividades privadas (extraescolares) fuera del horario lectivo.
Sin embargo, el texto aprobado por el Parlament defiende que “las ciudades y sus vecinos no se pueden permitir perder los patios como espacios deportivos de encuentro, juego y convivencia”.

Ya hay ayuntamientos trabajando en normativas locales que regulen la protección de la actividad en los patios tal y como va a dictar el nuevo marco legal autonómico. Es el caso del Ayuntamiento de Barcelona liderado por el alcalde Jaume Collboni, que ha manifestado públicamente su apoyo a la reforma legal para proteger la actividad en el patio de los colegios.