El ácido fólico es un nutriente esencial para las mujeres embarazadas, ya que desempeña un papel crucial en el desarrollo fetal temprano.
La ingestión adecuada de ácido fólico antes y durante el embarazo puede ayudar a prevenir defectos del tubo neural en el feto, como la espina bífida y la anencefalia. Por esta razón, es importante que las mujeres comiencen a tomar ácido fólico incluso antes de concebir.
Cuándo empezar a tomar ácido fólico en el embarazo
Expertos en salud recomiendan que las mujeres en edad fértil comiencen a tomar ácido fólico al menos un mes antes de quedar embarazadas.
Esto se debe a que el desarrollo del sistema nervioso del bebé ocurre durante las primeras semanas de embarazo, incluso antes de que la mujer se dé cuenta de que está esperando un hijo.
Tomar ácido fólico antes de concebir ayuda a asegurar que los niveles adecuados de este nutriente estén presentes en el cuerpo de la mujer cuando quede embarazada, lo cual es fundamental para el desarrollo saludable del feto.
Por lo tanto, es importante continuar tomando ácido fólico durante todo el embarazo. Durante el primer trimestre, el feto se desarrolla rápidamente y el ácido fólico juega un papel crucial en la formación de la médula espinal y el cerebro.

Beneficios del ácido fólico para las mujeres embarazadas
Además de ayudar en la formación adecuada del sistema nervioso y la médula espinal del bebé en desarrollo, este nutriente es fundamental para la producción de glóbulos rojos y el mantenimiento de un adecuado nivel de hierro en el cuerpo de la madre, previniendo así la anemia durante el embarazo.
También se ha demostrado que puede ayudar a prevenir el parto prematuro y el bajo peso al nacer. Estos beneficios se deben a su participación en los procesos de división y crecimiento celular, esenciales durante el embarazo.
Un aspecto importante a considerar al hablar de los beneficios del ácido fólico durante el embarazo es la cantidad adecuada a tomar.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda una dosis diaria de 400 microgramos (mcg) de ácido fólico para todas las mujeres en edad fértil, y aumentar esta dosis a 600-800 mcg durante el embarazo.
Sin embargo, hay casos en los que se puede requerir una dosis más alta, como en mujeres con antecedentes de defectos del tubo neural en embarazos anteriores. En estos casos, se puede recomendar una dosis de hasta 5 mg de ácido fólico.

Además de prevenir defectos congénitos y promover un desarrollo adecuado del bebé, el ácido fólico también tiene otros beneficios para las mujeres embarazadas. Este nutriente ayuda a fortalecer el sistema inmunológico de la madre, lo que la protege de posibles infecciones durante el embarazo.
También contribuye a la producción de energía y el metabolismo de proteínas, lo cual es fundamental para el crecimiento y desarrollo del bebé. Asimismo, el ácido fólico puede reducir el riesgo de complicaciones en el embarazo, como la preeclampsia y el parto prematuro.

Duración recomendada de la suplementación con ácido fólico
La duración recomendada de la suplementación con ácido fólico durante el embarazo es un tema de gran importancia para asegurar la salud y el bienestar tanto de la madre como del feto.
Se recomienda a todas las mujeres en edad fértil consumir suficiente ácido fólico para garantizar una reserva adecuada antes de quedar embarazadas.
Se estima que aproximadamente el 70% de los defectos del tubo neural podrían prevenirse si todas las mujeres en edad fértil consumieran la cantidad adecuada de ácido fólico.
Es importante destacar que solo el ácido fólico sintético se absorbe eficientemente en el cuerpo humano. El ácido fólico natural presente en los alimentos (como las verduras de hoja verde) es menos fácilmente absorbido.
Por lo tanto, para asegurar una ingesta adecuada de ácido fólico durante el embarazo, se recomienda tomar suplementos que contengan ácido fólico en su forma sintética.