El acné vaginal es una cuestión que todas las mujeres sufren en mayor o menor medida a lo largo de su vida y, sin embargo, se habla poco de ello. Las espinillas de toda la vida, que casi siempre salen en el rostro o en la espalda, por ejemplo, son también habituales en la zona genital. Son incómodos, molestos e irritantes.
Este tipo de acné tan concreto suele ser debido a una obstrucción e inflamación de los folículos pilosos y, con frecuencia, de la sobreinfección de los mismos”, explica Belén Gómez, ginecóloga en el Hospital Infanta Leonor de Madrid para Chilly. La zona concreta en la que más aparece, añade, es “el monte de Venus y en los labios mayores e inglés; es decir, donde se presenta el vello púbico, aunque en algunas ocasiones puede llegar a las nalgas”.

Estos granos, que suelen tener la famosa “cabeza blanca”, no dejan de ser pequeñas acumulaciones de pus, por lo que no se deben explotar ni utilizar medicamentos. Aparecen por distintos motivos, siendo los más habituales la depilación con cuchilla, la humedad muy alta en la zona, problemas de higiene íntima, exposición a baños termales o piscinas calientes y tratamientos antibióticos prolongados. “La manipulación de los folículos obstruidos, que irritará la piel y el folículo y favorecerá la sobreinfección del mismo; la dieta (estudios recientes relacionan el acné con dietas ricas en leche, y dietas de elevado índice glucémico) y los productos abrasivos empleados en zona genital, por ejemplo, con perfumes fuertes”, son otras de las posibles causas que destaca la doctora Belén Gómez.
Qué hacer al respecto
Esta foliculitis, que es como se describe clínicamente, se debe tratar en primer lugar con medidas higiénicas o físicas. Belén Gómez recomienda empezar por “aplicar paños limpios humedecidos con agua caliente sobre la zona inflamada y mantener hasta que se enfríen” durante tres veces al día alrededor de 10 o 15 minutos cada vez. “Esta maniobra favorecerá la higiene correcta de la zona y la apertura del folículo, para que no se infecten y evitar que se acumule pus en el interior del mismo”, señala.
También aconseja “No afeitar la zona genital o depilar con crema depilatoria durante el episodio de acné, ya que podemos irritar más la zona y producir lesiones que podrían sobreinfectarse con las bacterias propias de la piel”. Por este motivo, anima a optar por la depilación láser para la zona genital. Además, incide en la importancia de los lavados diarios con jabón antiséptico. “No emplear jabones específicos del acné facial o cutáneo ya que podrían ser muy fuertes para la zona genital”, advierte al respecto.
La doctora recuerda que solo si el brote de foliculitis presenta una infección fúngica se requerirá el uso de cremas antifúngicas como el fluconazol, pero “siempre prescritas por un especialista”. No debemos automedicarnos.
Y una vez se supere el brote, es esencial mantener una correcta higiene íntima, utilizar ropa interior fabricada con fibras naturales como es el caso del algodón, y favorecer la ventilación de tu zona íntima evitando la ropa ajustada y el roce excesivo. “Sobre todo durante el ejercicio, para evitar la humedad mantenida en la piel”, concluye la doctora Gómez para Chilly