En torno a los deberes escolares hay dos datos que nos pueden orientar a la hora de abordarlos en casa. Por un lado, según informes publicados desde la Universidad Complutense de Madrid, más de dos horas de tareas diarias de carácter escolar fuera del horario del colegio, son contraproducentes.
Y por otro lado, nuestro país es el quinto país de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo) en el que más tiempo dedican los estudiantes a los deberes escolares, seis horas y media a la semana.
Dos datos que muestran que quizás es el momento, como señalan también desde la Universidad de Harvard, de repensar las tareas escolares y su utilidad, tal y como están planteadas, como método de estudio y aprendizaje.
Harvard y los deberes del cole
Desde el Academic Resource Center de la Universidad de Harvard, se plantearon la necesidad de cambiar las estrategias de estudio de la etapa de educación secundaria, de cara a que sean realmente efectivas cuando los niños llegan a los estudios superiores.
No se necesitan, según este panel de expertos en educación, una batería de grandes cambios sino modificaciones puntuales o correcciones que cambien el modo en el que se están afrontando las distintas materias de los currículums escolares en la actualidad.
- La primera que plantean es dar prioridad a la retención de contenidos que se lleva a cabo en el aula mediante apuntes y notas porque las investigaciones señalan que la capacidad de los estudiantes de aprender algo se reduce cuando no lo comprenden del todo.
- La segunda sería que quizás no es tan importante la cantidad de información que se ofrece a los estudiantes como la necesidad, precisamente de que se entienda la información que se trabaja en el aula.
- La tercera se centra más en los tiempos de aprendizaje de los alumnos, un estudio constante a medida que se avanzan los temas en el aula, es el método más eficaz para aprender realmente las materias.
Un estudio que en parte se lleva a cabo también fuera del aula, en los deberes o las tareas que se hacen cada día en casa después del colegio.
¿Cómo hacer que los deberes funcionen realmente?
Desde el ámbito educativo se insiste en algunas sencillas indicaciones o pautas para que el momento de hacer los deberes en casa sea eficaz pero no eterno ni un motivo de conflicto familiar.
- Buscar el sitio. No tiene por qué ser un escritorio o en el dormitorio del niño, podemos buscar un sitio en la casa donde pueda haber más personas pero sí debemos respetar esa elección y el lugar debe estar bien iluminado y permitir al niño el acceso a todo lo que necesite para llevar sus deberes a buen término.
- Buscar el momento. Antes o después de jugar, antes o después de merendar, elegir el momento para hacer los deberes puede ser una decisión que hagamos juntos pero lo importante es mantener ese momento una vez elegido y acompañar a los niños mientras hacen sus tareas. No se trata de hacérselas, perfectamente podemos estar haciendo “nuestras propias tareas”: cálculos relacionados con las cuentas de la casa, leer un libro, revisar papeles de la familia,... Al mismo tiempo que estamos acompañando por si necesita de nuestra ayuda, estamos educando con el ejemplo, algo fundamental en la crianza de nuestros hijos.
- Buscar el motivo. Y al mismo tiempo evitar la recompensa porque el niño o la niña haga sus deberes cada día, es decir, porque cumpla con una obligación. Es importante la motivación y alentarle en el desempeño del trabajo, como también lo es no relacionarlo con la consecución de un premio.

TAMBIÉN LEE: