Seis tips de matrona para dar la bienvenida a un nuevo hermanito con éxito

¿Cómo dar la bienvenida a un nuevo hermanito? Una matrona nos cuenta unos cuantos secretos basados en su experiencia para tener éxito con el hermano mayor.
dar la bienvenida al bebé

La reacción del hermano mayor ante la llegada de un nuevo bebé a casa varía mucho en relación con su edad, su madurez y su carácter.

Hay niños que son más flexibles a los cambios y otros que tardan más en acostumbrarse a nuevas situaciones.

Muchos niños reflejan alegría al ir a ver al hermanito al hospital pero cuando llegan a casa se sienten desplazados, desconcertados o simplemente asustados por el cambio.

Es natural, son niños pequeños y nunca se han enfrentado a una situación con tantos matices emocionales.

Además, la llegada de un hermano toca el punto más débil de todo niño (perder el amor de su mamá o papá).

Algunas reacciones positivas podrán ser: curiosidad, interés, ganas de tocarle y acariciarles, comportamientos cuidadores...

Por el contrario, también podrán aparecer reacciones más negativas como: celos, conductas agresivas hacia el hermanito o los papás, comportamientos regresivos (volver a mojar la cama), cambios de humor (rabietas...)

Tips para hacer fácil la llegada de un bebé a casa donde hay más niños

Aquí van algunos tips que pueden hacerle la llegada del hermanito algo más fácil:

  • Prepárale con tiempo: Habla del bebé durante el embarazo. Dependiendo de su nivel de madurez podemos irle explicando qué va a ir sucediendo los siguientes meses (hospital, separación...). Existen cuentos maravillosos que les ayudan a entender la situación.
  • Los cambios de uno en uno: la llegada del hermanito supone un estrés. Por lo que es importante tratar de no juntar demasiados cambios a la vez (por ejemplo, si le cambiamos de cuarto a la vez que llega el bebé puede asociar su llegada con desplazamiento). Una vez en casa las rutinas deben ser lo más parecidas a la vida de antes que el bebé llegara.
  • Comparte tiempo con los dos: Trata de buscar tiempo todos los días para estar con él/ella (por ejemplo, el momento cuento) y disfruta del mayor en presencia del pequeño ("mamá me sigue queriendo, aunque esté el hermanito")
  • No le apartes enséñale: los niños de dos y tres años todavía hacen movimientos bruscos y no son capaces de entender que un bebé necesita delicadeza. No le grites o le castigues si da un manotazo al bebé, explícale que necesita que le toquen con suavidad. Un truco es enseñarle fotos de cuando él era bebé.
  • No le digas que tiene que querer al hermanito, pues querer no es una obligación. Debemos darle libertad de sentir y de expresar sus sentimientos, aunque sean de rabia o enfado, y tratar de mostrarnos empáticos: tiene miedo de perder tu amor, y tus enfados pueden confirmar sus temores.
  • Y por supuesto, la joya de la corona: inclúyelo en el cuidado del bebé. No se trata de darle obligaciones sino de incluirle en actividades rutinarias como si fuera un juego, así aumentamos el vínculo con el hermanito y pasa más tiempo con mamá/papá.

Mucho ánimo y paciencia.

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