En la sociedad contemporánea, pintar mandalas ha experimentado un auge notable.
Este antiguo arte trasciende culturas y generaciones, y según un estudio de la Journal of the American Art Therapy Association, aporta numerosos beneficios a niños y adultos por igual.
En su esencia, los mandalas representan figuras geométricas llenas de intrincadas formas y patrones que proporcionan un enfoque meditativo único para la mente.
Estos icónicos patrones han dado lugar a diversas páginas y cuadernos de mandalas para niños y adultos, ofreciendo un sinfín de posibilidades para explorar el arte y la creatividad.
Pintar mandalas no es solo una actividad artística, también es una herramienta terapéutica eficaz para liberar el estrés y la ansiedad. Se ha demostrado que pintar estas formas geométricas ayuda a las personas a centrarse, lo que reduce significativamente los niveles de estrés.
El dibujo a mano alzada en patrones de garabatos también puede ser una excelente manera de expresarse creativamente. No importa si eres un niño o un adulto, colorear mandalas es una actividad única que combina el arte, la relajación, y la meditación.
Ayuda a relajarse y a regular el estrés
Para todos, tanto niños como adultos, colorear es una actividad lúdica y emocionante.
El querer pintar una página de mandalas es más que la simple satisfacción de llenar de color una figura en blanco, te permiten sumergirte en un mundo de colores, formas y patrones.
Según el anterior estudio mencionado, al pintar mandalas nos concentramos en colorear, silenciamos nuestra mente, similar a cuando practicamos la meditación.
Esto nos permite relajarnos, liberándonos del estrés y de las preocupaciones cotidianas. Al pintar, la visión se enfoca en los innumerables patrones y formas que lo conforman.
En consecuencia, nuestros pensamientos se calman y nuestra mente logra concentrarse en el presente, en los colores que estamos eligiendo, en el patrón y las formas en las que estamos trabajando.
Además, proporciona un sentido de logro y satisfacción personal altamente gratificante. Cuando terminamos un dibujo, nos entrega esa satisfacción de haber completado algo con nuestras propias manos y es una excelente manera de exhibir nuestro propio arte.
Desarrolla la creatividad y la concentración
Las páginas de mandalas también son una excelente manera de fomentar la creatividad y la concentración tanto para niños como para adultos. Los diseños abstractos y la repetición de formas invitan a los niños y adultos a sumergirse en el proceso de pintar.
Desde los mandalas con diseños más sencillos hasta los más sofisticados y detallados, hay cuadernos para todos los gustos, edades y niveles de habilidad.
Aunque puede parecer una actividad simple, la Journal of the American Art Therapy Association asegura que en realidad ayuda a mejorar la coordinación motriz, la paciencia y la dedicación para completar una tarea.
Además, el hecho de seleccionar colores específicos y tomar decisiones sobre cómo desea que se vea el dibujo final puede mejorar las habilidades de resolución de problemas.
No solo eso, con algo tan simple como una hoja de colorear, estamos libres para experimentar con colores y técnicas de pintura y esto de alguna manera también ayuda a abrir nuevas formas de ver y apreciar el mundo.
En definitiva, los mandalas pueden ayudar a centrar la mente y liberar la creatividad bloqueada, ya que es una excelente forma de desconectar del mundo digital y centrarse en el presente.
