La meningitis es una inflamación de las meninges, las membranas que recubren el cerebro y la médula espinal, generalmente causada por bacterias o virus. La variante más grave es la meningitis bacteriana ya que puede llegar a ser fatal, pero por suerte es poco frecuente. La meningitis viral es más común, aunque en algunos casos difícil de identificar ya que sus síntomas se parecen a los de una gripe común.
Se estima que 8 de cada 10 casos de meningitis ocurren en la infancia, sobre todo antes de los 10 años de edad, y si no se trata a tiempo, puede llegar a ser muy peligrosa . Incluso con un tratamiento adecuado la meningitis puede causar la muerte a 1 de cada 10 niños afectados y dejar secuelas hasta en un 30% de los afectados. Por suerte, existen vacunas que ayudan a prevenirla. En farmacias podemos encontrar desde hace tiempo la vacuna Nimenrix frente al meningococo, ya utilizada desde hace años en las unidades de vacunación internacional y del viajero.
¿Qué es la vacuna Nimenrix?
Nimenrix está indicada para inmunizar a las personas a partir de 6 semanas de edad frente a la enfermedad meningocócica invasiva causada por la Neisseria meningitidis de los grupos A, C, W-135 e Y.
Es importante comprender que no existe un único germen que cause las infecciones de las meninges. En lo que respecta al meningococo, por ejemplo, existen 12 serogrupos, cada uno con características que los diferencian. De ellos, cinco serogrupos son los que causan la mayoría de las meningitis: A, B, C, W, Y. En España, aproximadamente el 50% de los casos están causados por el meningococo B y el 50% restante por los serogrupos contenidos en la vacuna tetravalente Nimenrix.
¿Cómo se administra y a quienes se recomienda?
En los lactantes de 6 semanas a 12 meses la serie de vacunación recomendada consiste en tres dosis de 0,5 ml cada una. En el lactante la serie primaria consiste en dos dosis, la primera administrada a partir de las 6 semanas y con un intervalo de 2 meses entre dosis. Se recomienda una tercera dosis de refuerzo a los 12 meses de edad. En los niños de más de un año, adolescentes y adultos se administra una única dosis de 0,5 ml, aunque en algunos casos el médico puede recomendar una segunda dosis.
En el caso de las mujeres embarazadas o que estén lactando, solo se recomienda su aplicación si es estrictamente necesario ya que no existen suficientes estudios que demuestren que la vacuna es segura para el feto y/o el bebé tan pequeño.
El Comité Asesor de vacunas de la Asociación Española de Pediatría recomienda informar sobre la existencia de esta vacuna y administrarla en estas circunstancias:
- Lactantes a los 4 meses, 12 meses y posteriormente refuerzo a los 12 años de vida.
- Adolescentes a los 12 años para protegerles directamente e indirectamente proteger a los lactantes.
- Bebés de más de 6 semanas de vida que vayan a viajar a países con una incidencia elevada de la enfermedad meningocócica invasiva por los serogrupos incluidos en la vacuna o en aquellos que tengan factores de riesgo como la falta de bazo o que estén en contacto con personas infectadas.
En realidad, se está haciendo hincapié en los adolescentes porque aproximadamente el 23% de ellos son portadores de la Neisseria Meningitidis (meningococo), lo cual significa que pueden transmitir la enfermedad a través de las gotitas de saliva. Con la vacuna se protege al portador y se evita el riesgo de contagio.
¿Cuáles son sus efectos secundarios?
Al igual que la mayoría de las vacunas, Nimenrix puede provocar algunos efectos secundarios, el más común es el dolor cabeza en un 22% de los casos, seguido por fatiga en un 21,9%, los síntomas gastrointestinales en un 9,4% y la fiebre en un 5,3%. También puede provocar pérdida de apetito, irritabilidad y somnolencia.