Las carreras matutinas, al menos los primeros días de colegio, son un clásico en la mayoría de las familias. Aunque parezca que has calculado bien los tiempos, no se sabe por qué resulta que un día o dos o muchos más, la hora se os echa encima y llegar al colegio es casi una carrera de obstáculos.
Puedes hacer muchas cosas pero descarta lo de aparcar en doble fila en la puerta del colegio para que salgan los niños deprisa y corriendo porque te puedes llevar a casa una multa de 200 euros y eso sí que es una forma muy mala de empezar el curso.
La ley es la ley
Y precisamente la Ley de Tráfico es de lo más clara en este sentido, aparcar en doble fila no está permitido y conlleva una sanción de 200 euros, aunque solo sea “un momentito” porque obstaculiza la circulación y eso en la puerta del centro escolar, precisamente cuando no dejan de llegar alumnos, puede ser un problema enorme.
Como es lógico, la Dirección General de Tráfico recomienda que aparquemos el vehículo correctamente, que llevemos la mochila en el maletero y que accedamos al centro escolar a pie. Tampoco es tanto tiempo el que tenemos que invertir y facilitamos el acceso de alumnos y profesores.
Lo malo es que encontrar un sitio para dejar el coche puede ser muy complicado cuando buscamos en zonas urbanas.
“Aunque pueda parecer algo simple y obvio, es importante incluir en nuestras rutinas un margen de tiempo que nos permita estacionar sin complicaciones”, señala Jaime Requeijo, director general de la empresa EasyPark, “además, es importante recordar sacar la mochila del maletero ya que es el lugar más seguro para guardarla en caso de frenadas o movimientos bruscos”, añade.
Menos de dos minutos
Si no queda otra porque la mañana se ha torcido más de la cuenta, podemos no ser sancionadas siempre que el conductor no abandone el vehículo y la parada para que se bajen los niños no supere los dos minutos de tiempo.
Es verdad que no es la mejor opción porque con el movimiento de coches que se genera alrededor de los colegios e institutos a la crítica hora de inicio de las clases, un coche en doble fila, aunque solo sean dos minutos, va a perjudicar inevitablemente el flujo de la circulación del entorno.
Además, no es la mejor manera de asegurar que nuestros hijos lleguen a tiempo a sus clases ni de tener un buen día, más tranquilo y con menos estrés.
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