La obesidad infantil es una amenaza que se ha convertido en una epidemia global, con graves consecuencias para la salud a largo plazo. Sin embargo, un equipo de investigadores españoles ha desarrollado una innovadora herramienta de IA capaz de predecir el riesgo de desarrollar enfermedades metabólicas en niños con obesidad. Esta herramienta promete revolucionar la forma en que abordamos esta problemática de salud pública.
Distintos equipos del Centro de Investigación Biomédica en Red (CIBER) en el contexto del proyecto EprObes (Prevención Temprana de la Obesidad) han desarrollado un modelo de Inteligencia Artificial (IA) explicable para predecir el riesgo de alteraciones metabólicas en niños con obesidad.
El trabajo, publicado en la revista Artificial Intelligence in Medicine, destaca por integrar datos clínicos y epigenéticos para estimar los riesgos metabólicos en los próximos años.

Cómo funciona
El desarrollo de esta innovadora herramienta fue posible gracias a la colaboración de un equipo multidisciplinario de investigadores españoles, quienes trabajaron arduamente durante varios años. El proyecto, financiado por el Instituto de Salud Carlos III y la Unión Europea, reunió a expertos en diversas áreas, como medicina, genética, bioinformática y inteligencia artificial.
Esta inteligencia artificial, fruto de años de investigación y desarrollo, utiliza una combinación de datos clínicos y genéticos para realizar predicciones altamente precisas buscando prevenir la obesidad mediante la identificación temprana de factores de riesgo y permitiendo de este modo una intervención más eficaz y más preventiva incluso.
Al calcular el IMC infantil y analizar la información que ofrece el índice de masa corporal, junto con los datos de los niveles hormonales y determinados marcadores genéticos específicos, la IA puede identificar a los niños con mayor riesgo de desarrollar enfermedades metabólicas asociadas a la obesidad, como es la diabetes tipo 2 y las enfermedades cardiovasculares.
Los beneficios de la detección temprana
Una de las características más destacadas de esta herramienta es su capacidad de explicar sus resultados. Esto significa que los médicos pueden entender cómo la IA llega a sus conclusiones, lo que facilita la toma de decisiones clínicas y la comunicación con los pacientes.
“Esta combinación de datos permite no solo la predicción precisa de riesgos, sino también una mayor comprensión de cómo el modelo procesa las variables, lo que posibilita su aplicación en entornos clínicos de forma más efectiva”, explica Álvaro Torres, investigador del CIBEROBN.
La implementación de esta herramienta en la práctica clínica podría tener un impacto significativo en la salud de millones de niños porque la obesidad infantil puede ser reversible siempre que se detecte y se actúe a tiempo. Esta nueva herramienta, al permitir una detección temprana de los riesgos, los profesionales sanitarios pueden intervenir de manera oportuna, implementando cambios en el estilo de vida y, en algunos casos, incluso prescribiendo tratamientos farmacológicos para prevenir el desarrollo de enfermedades graves.
Además de mejorar la salud de los niños, esta herramienta también podría generar importantes ahorros económicos a largo plazo a la sociedad en su conjunto. Al prevenir enfermedades crónicas, se reducirían los costos asociados a hospitalizaciones, tratamientos y pérdida de productividad.

El futuro de la IA en la medicina
Este avance representa un hito importante en el campo de la medicina personalizada y demuestra el enorme potencial de la inteligencia artificial para transformar la atención médica. En el futuro, podemos esperar ver el desarrollo de herramientas de IA aún más sofisticadas, capaces de diagnosticar y tratar una amplia gama de enfermedades de manera más precisa y eficiente.
La inteligencia artificial está revolucionando la forma en que abordamos la obesidad infantil. Gracias a esta nueva herramienta, los médicos podrán identificar a los niños en riesgo y ofrecerles una atención más personalizada y efectiva. Si bien aún queda mucho por hacer, este avance representa un paso importante hacia un futuro más saludable para las generaciones futuras.
