Desde la escuela Waldorf al método Pickler, pasando por supuesto por la metodología Montessori. El hecho de que el material más elegido por estas corrientes educativas sea la madera se fundamenta en numerosas razones y todas ellas lo colocan muy por encima de cualquier otro material a la hora de construir juguetes para las niñas y los niños.
Hasta jóvenes artesanas que han decidido dedicarse a la construcción de juguetes infantiles, eligen diseñarlos y construirlos en madera porque consideran que de este modo les ofrecen a los niños una alternativa distinta que contribuye más y mejor a su desarrollo.
Claudia Kühn es artesana y tiene claro que “al regalar un juguete hay que pensar en el significado que tendrá ese objeto para el niño, para qué va a servir, cómo lo va a ayudar, si beneficia o no en su crecimiento”.
Ella apuesta por la madera uniendo así sus dos pasiones, la carpintería y la docencia porque según ella misma señala “nada enciende más la mente de un niño que jugar y con estos productos simples y nobles se los invita a explorar el mundo y a dejar volar la imaginación.”
Creatividad, imaginación y madera
Tanto la escuela Montessori como la Waldorf llevan décadas trabajando con la madera como material para la elaboración de juguetes que potencian la autonomía y el desarrollo psicomotriz y cognitivo de los más pequeños, pero no solo eso.
Es por todo ello que la teoría del movimiento libre o método desarrollado por la pediatra húngara Emmi Pickler, también se decanta por la utilización de la madera en la construcción de los juguetes infantiles.
¿Por qué la madera es el material ideal?
La lista de motivos que señalan a la madera como el material ideal para los juguetes infantiles es muy extensa, algunos de los puntos más importantes a tener en cuenta son los siguientes:
- Son juguetes que perduran más en el tiempo al estar creados en un material que resiste los golpes, el paso de los años, el uso y además, puede repararse con más facilidad que otros materiales.
- Pueden tener un precio más elevado que los mismos juguetes elaborados en otros materiales, sin embargo los juguetes de madera son más económicos por lo mencionado en el punto anterior sobre su durabilidad y la posibilidad de arreglo.
- El olor de la madera es una de sus características, el olor a naturaleza junto con el tacto y el peso de estos juguetes, consiguen estimular los sentidos del niño desde el primer momento y a cualquier edad.
- La madera es un material respetuoso con el medio ambiente, con lo que estamos inculcando a nuestros hijos la importancia de cuidar y conservar la naturaleza, a través de la decisión de poner a su disposición este tipo de juguetes y no otros de otros materiales.
- Los juguetes de madera permiten que el niño o la niña desarrolle su imaginación, al ser menos estructurados y rígidos permite que se inventen escenarios por parte del usuario y al no tener pilas les permite concentrarse en la actividad y el juego que ellos mismos pueden estar inventando.

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